Torra muestra su apoyo a ERC y exige a Borrell que se disculpe por «calumniar»

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha salido hoy en apoyo de los diputados de ERC en el Congreso y ha instado al ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, a «disculparse» por la bronca en la sesión de control o a ser «reprobado».

El diputado de ERC Gabriel Rufián ha sido expulsado del pleno del Congreso por la presidenta de la Cámara Baja, Ana Pastor, tras ser llamado al orden por tres veces al protagonizar un duro rifirrafe con Borrell.

Posteriormente, Borrell ha denunciado que un diputado de ERC, que no ha identificado, le ha escupido en el momento en que los parlamentarios republicanos abandonaban el pleno en protesta por la expulsión de Rufián.

Desde Twitter, Torra se ha hecho eco de lo sucedido en el Congreso: «Todo mi apoyo a los compañeros y compañeras de ERC en Madrid, y en especial a mi amigo Joan Capdevila, injustamente calumniado», ha señalado, en alusión al diputado sobre quien se especulaba inicialmente que podría haber sido el autor del escupitajo denunciado.

«El ministro Borrell debe disculparse inmediatamente o ser reprobado por el Congreso», ha añadido el presidente catalán.

Sobre los jueces

Torra además ha afirmado hoy que «la cúpula del poder judicial español está devastada» y ha anunciado una ofensiva para internacionalizar su denuncia y alertar de que los presos soberanistas «no tendrán un juicio justo».

Así lo ha explicado en la sesión de control al presidente de la Generalitat, en un pleno del Parlament en el que no se han vivido los episodios de crispación de anteriores debates parlamentarios.

Precisamente hace dos semanas, el presidente del Parlament, Roger Torrent, dio un toque de atención a los diputados y les exhortó a «no degradar» la cámara catalana, ante los constantes rifirrafes.

Más allá de los habituales duelos dialécticos en relación con el proceso soberanista y, especialmente, la cuestión de los presos, hoy Torrent no ha tenido que llamar al orden a ningún diputado.

La causa judicial del 1-O ha vuelto a centrar, en cualquier caso, buena parte del debate en la sesión de control, en la que Torra ha afirmado: «Es imposible pensar que nuestros presos políticos puedan tener un juicio justo. Esto es absolutamente imposible y tenemos que denunciarlo cada día, y lo denunciaremos a partir de ahora internacionalmente».

Torra ha considerado que el juicio a los «presos políticos y exiliados» supondrá un paso más en el «desprestigio» de la justicia española, ya que los encausados se dedicarán a «acusar» al Estado.

«La causa de los catalanes está más internacionalizada que nunca, y yo me dedicaré los próximos meses a ir por el mundo a explicar qué está pasando en el país, con este sistema judicial», ha subrayado.

En la sesión de control, Torra y la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas, se han cruzado sendas pullas, con carga irónica, sobre sus recientes desplazamientos a Euskadi y Andalucía.

«Bienvenida a Cataluña. Gracias por haber hecho un hueco durante la campaña electoral andaluza», ha dicho Torra nada más tomar la palabra para dirigirse a Arrimadas, que este fin de semana ha participado en actos electorales de Ciudadanos en Sevilla y Cádiz.

En la réplica, Arrimadas le ha reprochado su reunión con el líder de la izquierda abertzale Arnaldo Otegi en su visita del pasado miércoles a San Sebastián, antes de pronunciar una conferencia sobre Cataluña en el Kursaal: «Usted se va a Euskadi a abrazarse con Otegi y yo voy a la tierra de mis padres, mis hermanos y mis sobrinos a defender sus derechos», le ha espetado, haciendo referencia a sus orígenes en Jerez de la Frontera (Cádiz).

Por su parte, el portavoz de JxCat, Albert Batet, ha acusado al Estado de «comportarse como Turquía» al mantener encarcelados a los soberanistas encausados por el 1-O y ha expresado su temor a que, durante el juicio en el Supremo, sean tratados «como en Guantánamo».

El primer secretario del PSC, Miquel Iceta, ha alertado a Torra de las «agresiones, actos de violencia e intimidaciones» que han protagonizado en Cataluña «intolerantes» que «no respetan las ideas que no comparten» y ha reclamado una «respuesta lo más amplia, contundente, unitaria y rápida» posible.

La presidenta del grupo parlamentario de Catalunya en Comú Podem, Jéssica Albiach, ha exigido al Govern que en su propuesta de presupuestos incluya una reforma fiscal que «proteja» a las «clases medias y bajas» y que acabe con «los privilegios de los ricos».

Mientras tanto, el presidente del PPC, Alejandro Fernández, ha exigido a Torra que dimita y «vuelva al activismo» porque «como gobernante es una calamidad».

Después del accidente mortal en Vacarisses (Barcelona) a raíz del descarrilamiento de un tren de cercanías, la diputada de ERC Anna Caula ha reclamado que se articule «un frente común desde Cataluña» para forzar al Estado a cumplir con las inversiones comprometidas que no se han ejecutado: «La infrafinanciación es histórica y la tomadura de pelo, también», ha afirmado.

Torra ha coincidido en exigir más inversiones en cercanías: «Toca empezar a analizar qué ha pasado», ha advertido el president, que ha denunciado un incumplimiento de las inversiones previstas en el Plan de Cercanías de Barcelona para el período 2008-2015, que preveía 4.000 millones de los que solamente se ha ejecutado el 13,5 %.