La ministra Isabel Celaá se escapa en avión de Madrid minutos después de decretar el estado de alarma

A los pocos minutos de aprobar el decreto del estado de alarma sobre Madrid en el Consejo de Ministros, Isabel Celaá, ministra de Educación, ha cogido la maleta y se ha desplazado hasta el aeropuerto de Barajas. Sin que el decreto estuviera aún publicado en el Boletín Oficial del Estado, Celaá se ha subido en un avión comercial de la compañía Air Europa, con salida a las 14:45 horas, cuyo destino era su ciudad de origen, Bilbao.

Celaá ha sido la última pasajera en embarcar en la aeronave, un protocolo habitual entre las personas VIP. Lo ha hecho sin pasar ningún control policial y embarcando por la zona de autoridades del aeródromo madrileño. Con todo el pasaje dentro del avión la titular de Educación se ha montado a pie por las escaleras del lateral del finger y se ha sentado en la primera fila, reservada para pasajeros con billetes business.

La ministra tenía esta mañana un acto en Navarra junto al titular del Interior, Fernando Grande-Marlaska. El acto finalmente se ha anulado por la presencia de ambos en la reunión extraordinaria del Consejo de Ministros que ha dado luz verde al estado de alarma en la Comunidad de Madrid. Eso ha provocado que la ministra se quedase en Madrid hasta primera hora de la tarde, cuando ha abandonado la capital en el avión citado.

Este periódico se ha puesto en contacto a media tarde con el Ministerio de Educación para recabar información al respecto del viaje de Isabel Celaá. Sin embargo, a la hora de publicar esta noticia, y una hora más tarde de la consulta, no hemos recibido respuesta desde su gabinete, aunque se han comprometido a comentar con OKDIARIO el motivo del desplazamiento de la ministra que, salvo la agenda matinal en Navarra, no tenía más compromisos para esta tarde. Fuentes cercanas a la ministra aseguran que el motivo del desplazamiento se trata a una visita médica a su doctor de cabecera tras sufrir un cólico la pasada noche.

La semana pasada, nada más confinar Madrid vía orden ministerial, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, también hizo las maletas para viajar hasta la isla de La Toja, en Galicia. El mismo día que entraban en vigor las medidas restrictivas en la capital española el jefe del Ejecutivo se marchaba a un balneario para participar en unas jornadas económicas.

Controles policiales a los madrileños

Mientras Isabel Celaá se marchaba en avión, y sin que el decreto estuviera aún publicado en el BOE, decenas de miles de madrileños quedaban atrapados en los controles desplegados por Interior para hacer real el confinamiento sin que éste tuviera aún cobertura legal.

El hecho ha sido denunciado por muchos madrileños que se han visto afectados por los controles policiales desplegados sin el decreto aún en vigor. También por políticos como la abogada del Estado y diputada de Vox Macarena Olona, que ha colgado el siguiente tuit.

Además, 1.410 personas fueron detenidas por desobediencia y resistencia a la autoridad en la región, hubo 2.091.750 identificaciones y 29.390 vehículos fueron interceptados en la vía pública sin autorización para circular en esta primera época de alarma, según los datos recabados por la Delegación del Gobierno, que es el organismo que tramita dichas sanciones.

En su comparecencia de este viernes, Fernando Grande-Marlaska ha repetido en varias ocasiones que la actuación policial lo que hace es atender a una «preocupación por la salud» en un contexto de pandemia por COVID-19, y en vísperas del Puente del 12 de Octubre. En este sentido, ha indicado, que los agentes hasta este mismo viernes han establecido «controles informativos». «El fin primero y último es garantizar la salud de los ciudadanos», ha concluido.

Un patrimonio inmobiliario de 4 millones

El patrimonio inmobiliario de la ministra de Educación, Isabel Celaá, asciende ya a casi 4 millones de euros. Una valoración compuesta por pisos, chalés, fincas y caseríos que suma 20 veces lo declarado por la propia ministra y portavoz del Gobierno en su declaración oficial de bienes en el BOE. Y es que en su ficha oficial de supuesta transparencia tan sólo anotó 195.408 euros.

Según ella y su Gobierno, esa cifra de 195.408 euros es perfectamente válida porque Celaá asegura que ha incluido la valoración catastral, cuando, en verdad, lo que tiene que consignar es el valor real. Porque ni la ley, ni el reglamento, ni el modelo exigido de declaración de bienes y publicado en el BOE hacen alusión alguna a que esa valoración deba ser la catastral. Todo lo contrario, el preámbulo de la norma exige que la valoración e información plasmada sea “transparente” y “comprensible” por cualquier ciudadano.