Mas declara como imputado por desobediencia el 9-N
Artur Mas ha declarado como imputado ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que investiga un presunto delito de desobediencia. El presidente de la Generalitat abrió los colegios y colocó las urnas el pasado 9 de noviembre pese a tener la prohibición expresa del Tribunal Constitucional.
El interrogatorio del magistrado Joan Manel Abril ha durado cerca de una hora y media. A él han asistido los abogados de Mas, Xavier Melero y Judit Gené, así como el fiscal superior de Cataluña, José María Romero de Tejada, el teniente fiscal Francisco Bañeres y el fiscal Anticorrupción Emilio Sánchez Ulled, designado expresamente ara dar apoyo al ministerio público en este caso.
El separatismo se ha puesto del lado de los imputados, organizando protestas que el TSJC considera un «ataque directo» a su independencia. El victimismo se ha acentuado con la efeméride del fusilamiento de Lluís Companys, también un 15 de octubre, fecha que los promotores del 9-N y sus fieles no han desaprovechado.
De hecho, Mas ha llegado al TSJC arropado y jaleado por unas 3.000 personas; 400 de ellas, alcaldes.
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