España
Falsa agresión en Madrid

Marlaska defendió en la SER y TVE la veracidad de la agresión homófoba pese a los indicios de que era falsa

Marslaka el martes en la Ser: "La Policía va a determinar quiénes son y cómo actuaron"

Marlaska el miércoles en TVE: "Los autores serán identificados y puestos ante la Justicia"

Marlaska vendió la agresión homófoba pese a que la Policía la investigaba como falsa desde el martes

Marlaska alimentó durante 3 días la agresión homófoba falsa: «La Policía va a determinar quiénes son»

  • Agustín de Grado
  • Subdirector y responsable del Área Política en OKDIARIO. Antes jefe de área en ABC, subdirector en La Razón y director de Informativos en Telemadrid.

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, concedió sendas entrevistas a la Cadena Ser y TVE en las que alimentó el bulo de la agresión homófoba de Malasaña. Y lo hizo cuando ya tenía información oficial de la Policía de que la versión del joven supuestamente agredido presentaba muchas dudas sobre su veracidad y convenía mantener la prudencia sobre los hechos denunciados.

Ninguna cámara de seguridad grabó el grupo de ocho encapuchados, ningún testigo los vio y nadie en el edificio escuchó nada el domingo por la tarde cuando el denunciante aseguró haber sido violentamente atacado. Desde el lunes, la Policía no encontraba ningún indicio que pudiera corroborar el relato que la supuesta víctima había hecho en comisaría el domingo por la noche.

Los resultados de todas estas pesquisas, cuando la investigación policial ya apuntaba hacia una denuncia falsa, fueron trasladados al ministro en la tarde del martes. Sin embargo, Grande-Marslaka no tuvo reparos en acudir a una entrevista en Hora 25, de la Cadena Ser, para asegurar de forma taxativa que se trataba de la agresión de una manada homófoba, cuyos integrantes no debían tener ninguna duda de que la Policía iba a «determinar quiénes son y cómo actuaron».

«Todavía no hay identificados en el caso de Madrid. Lo que tiene que tener claro es que tenemos los medios para proceder a la identificación», le dijo Grande-Marlaska, sin atisbo de duda, a Aimar Bretos, el periodista que le entrevistaba.

Otra entrevista

Al día siguiente, en la mañana del miércoles, el ministro acudió a TVE para ser entrevistado en el canal 24 Horas. El joven supuestamente agredido estaba a sólo unas horas de confesar que todo fue un invento, pero Grande-Marlaska siguió el mismo guión: dar pábulo a un ataque homófobo intolerable alentado por el discurso de Vox.

«Los autores de estos hechos, antes o después, tendrán que responder ante la Justicia», afirmó el ministro antes de insistir en que se trataba de una «investigación complicada», pero de la que no dudó de que acabaría con los responsables de la supuesta agresión «identificados y puestos a disposición judicial».

Grande-Marlaska insistió, literalmente, en que “hay discursos que están en el límite de lo que es procedente y oportuno” y explicó que Vox “juega en ese límite”.

Órdenes de Marlaka a la Policía

Como ha desvelado OKDIARIO en exclusiva, los agentes de la Policía encargados de la investigación tenían orden de reportar sus pesquisas cada 20 minutos para que sus mandos las hicieran llegar hasta el máximo responsable del Ministerio del Interior. No había una sola imagen, un solo testigo que corroborara, aunque fuera tangencialmente, la versión del joven.

Y, pese a ello, durante dos días y hasta pocas horas antes de que el denunciante confesara, el ministro dio carta de naturaleza a lo que sólo era la invención de un joven de 20 años que temió la reacción de su pareja tras haber participado en una sesión sadomasoquista que concluyó con la palabra «maricón» marcada a cuchillo en uno de sus glúteos.

La implicación directa del ministro del Interior en la campaña de la izquierda política para culpar a Vox de la agresión hasta que se conoció su falsedad ha puesto al ex juez en el disparadero una vez más. Vox ha solicitado en el Congreso su reprobación y destitución por «promover el odio y la violencia contra la tercera fuerza política de España».

Por su parte, el PP ha lanzado una ofensiva parlamentaria para que explique por qué el ministro adelantó «detenciones inmediatas» horas antes de que terminara sabiéndose de que la supuesta banda homófoba no existía y la agresión no fue tal.