España

La Casa Real pide que Franco no vaya a La Almudena porque allí se celebran actos de Estado

La Casa Real no quiere entrar en la polémica abierta por el deseo de Pedro Sánchez de exhumar los resto de Francisco Franco. Pero sabe que tiene un protocolo; que ese protocolo se apoya para los actos con contenido religioso en la Catedral de La Almudena; y que no quiere que esos actos puedan quedar mezclados con la batalla política por la ubicación de los restos del dictador. Por eso, Zarzuela no cree que la mejor localización de la futura tumba de Franco sea el mismo escenario que el que va a acompañar la imagen de una monarquía de un país democrático.

Y por eso Zarzuela ha filtrado ya su parecer sobre este punto, pese a no querer interferir en los deseos de la familia de los Franco, que de hecho, ya han reiterado que su elección principal es La Almudena como destino de los restos del dictador.

Lo cierto es que, de todos modos, este debate, aún tiene un paso intermedio: y es que el Gobierno aún debe dar muestras de que efectivamente puede exhumar el cadáver, cuestión que, pese a las promesas de Pedro Sánchez, se le sigue resistiendo.

Pero, avance como avance este asunto, lo cierto es que una de las instituciones que ha mostrado su preocupación por la situación generada por el presidente del Gobierno es Zarzuela.

La explicación es sencilla: los actos de Estado con ceremonia o contenido religioso en los que está presente la figura de los Reyes de España -como han podido ser misas por asesinados como los del 11-M o funerales con rango de Estado- se desarrollan en La Almudena. Y eso implica que la tumba de Franco formará parte de la postal de fondo.

Moncloa es consciente de esta situación. Y aunque por factores muy distintos, sabe que, tras sacar al dictador de la cripta de la Basílica del Valle de Los Caídos, cualquier acto o celebración de los partidarios de Franco, lejos de tener que hacerse fuera de Madrid se haría en pleno centro y literalmente al alcance de metro o autobús.

La propia familia del dictador no ha ocultado sus intenciones de mostrar respeto por su abuelo aprovechando la salida de los restos mortales y ya ha adelantado que el primero de los actos que quiere que se celebre allí como ceremonia oficial con protocolo de jefe de Estado es el de la propia sepultura de Franco en la cripta de la catedral. Y eso implica que se haga con todos los honores civiles y militares que corresponden a ese rango, el de jefe de Estado.

Honores de Estado

El planteamiento de la familia cuenta, además, con el respaldo legal del protocolo de Estado exigido en el caso de sepultura de Jefes de Estado. Y Franco lo fue. Y exigiría contar con una comitiva fúnebre con los restos del dictador a la que seguirían la interpretación del himno nacional y una descarga de fusilería a cargo de soldados del Ejército. La regulación de este tipo de actos está plasmada en un decreto del año 2010, elaborado en la época de Gobierno del presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero.

Se trata del Real Decreto 684/2010 de 20 de mayo por el que se aprueba el Reglamento de Honores Militares, que regula que “las Fuerzas Armadas rendirán honores fúnebres militares en señal de respeto y homenaje a los restos mortales de aquellas personas que se indican a continuación: los ex presidentes del Gobierno y otras personalidades de especial relevancia a las que por sus excepcionales servicios a España así se determine por real decreto de la Presidencia del Gobierno; y los militares y el personal civil con una especial vinculación con la Defensa y las Fuerzas Armadas que fallezcan en acto de servicio”.

Desde el Gobierno saben que ellos han prendido una mecha que va a reavivar los actos en defensa de Franco. No les preocupa porque consideran que se trata de una cuestión que no les perjudica como opción política y porque en el fondo siguen convencidos de que era necesario realizar la exhumación pese a la polémica generada. Pero lo saben. Y saben, por lo tanto, que los actos de protocolo que se desarrollen en La Almudena también pueden ser empleados como una plataforma mediática para que los franqueas obtengan foco y presencia pública. Y los principales actos con protocolo oficial en La Almudena son precisamente los que desarrolla allí la Casa Real.