Los supermercados están que trinan: Family Cash está plantando cara con estos precios
Family Cash se ha convertido en uno de los supermercados en el que encontrar mejores ofertas
La guerra de precios en el sector de los supermercados siempre ha sido una batalla silenciosa, pero en los últimos tiempos empieza a librarse a cara descubierta. Cada vez son más las cadenas que tratan de ganarse la fidelidad de los consumidores a golpe de descuentos y ofertas irresistibles. Y claro, en este panorama, cualquier actor que llegue con una propuesta fresca y rompedora, no tarda en llamar la atención. Y eso es lo que es exactamente lo que está ocurriendo con Family Cash.
Family Cash es la cadena que, sin hacer demasiado ruido mediático, está conquistando a quienes buscan calidad y ahorro. Su estrategia es sencilla: precios bajos, variedad y una experiencia de compra eficiente. Y lo mejor de todo es que no se trata solo de percepción: los datos demuestran que en muchos productos, Family Cash ofrece precios muy por debajo de los grandes del sector, como Carrefour o Aldi. Así, poco a poco, la presencia de esta cadena se hace sentir. Y los gigantes del supermercado están empezando a fijarse (y mucho) en este nuevo competidor que les está quitando clientes y protagonismo. Porque, si algo queda claro, es que cuando el consumidor encuentra productos frescos, básicos y de marca a un precio más bajo, no duda en cambiar sus rutinas de compra.
Family Cash planta cara con estos precios
Lo que más sorprende de Family Cash no es sólo su política general de precios bajos, sino la contundente diferencia en productos de uso diario. Basta con repasar algunos ejemplos para entender por qué tanta gente se está pasando a esta cadena:
- Plátanos de Canarias a 1,19 € el kilo: En otros supermercados, no es raro encontrar precios de hasta 1,80 € o 2 € el kilo. El ahorro en un producto tan básico y consumido es inmediato.
- Manzanas a 1,49 € el kilo: Otro clásico que en la mayoría de competidores supera los 2 €.
- Escalopines en adobo por 4,49 €: Una opción de carne preparada a un precio que difícilmente se encuentra en otras grandes superficies.
A estos precios se suman ofertas en bebidas, productos de limpieza, y una gran variedad de frutas y verduras que permiten llenar el carrito por mucho menos de lo que estamos acostumbrados. De hecho, una compra completa, con alimentos frescos, productos de despensa y artículos de limpieza, puede salir por poco más de 47 euros. Un importe que hace unos años era habitual, pero que hoy en día resulta casi un milagro.