La junta de accionistas de Bankia aprueba la fusión con Caixabank gracias al apoyo del Estado

La mayoría accionarial del Estado en Bankia, que supera el 60% a través del FROB, ha servido para que la junta de accionistas del banco nacionalizado apruebe este martes su fusión con Caixabank, que va a crear la primera entidad de España y aspira según palabras de su presidente ejecutivo, José Ignacio Goirigolzarri, a ser no solo el banco más grande de España sino también «el mejor banco».

Con el 62% del capital por parte del Fondo de Regulación Ordenada Bancaria -FROB-, se garantizaba la aprobación de todos los puntos del orden del día en la junta general celebrada este martes en el Palacio de Congresos de Valencia. A pesar de esta victoria segura, Goirigolzarri se ha esforzado para pedir el máximo apoyo a la operación.

Antes de la votación, el directivo vasco ha destacado que el futuro banco con accionariado estatal será más rentable y esto le va a permitir que abone un dividendo mayor en efectivo. ‘Goiri’ también explicó que Bankia quiso adelantarse, ante una posible concentración del sector, para llevar a cabo una integración desde una posición de mayor fortaleza financiera a la que puede haber luego con los efectos del coronavirus.

Un gran volumen

Tal y como ha hecho el relato Goirigolzarri, Bankia se encontró con Caixabank y con ellos vio la posibilidad de crear un grupo con un volumen de activos superior a 660.000 millones, cuotas de mercado cercanas al 25 % y más de 20 millones de clientes, según informa Efe.

El banquero de Bilbao ha hecho especial hincapié en la rentabilidad de Bankia, porque el nuevo grupo bancario espera más de 1.000 millones de euros en sinergias: 290 millones al año por mayores ingresos y un ahorro de costes de 770 millones a partir del 2023.

Goirigolzarri ha señalado que Bankia con Caixabank no quiere solo ser el banco más grande de España, sino también el mejor para sus clientes

Para el presidente de Bankia era fundamental encontrar un socio con una cultura y unos valores comunes para mitigar el riesgo de implementación que toda fusión conlleva, entre ellos la reestructuración de la red y los ajustes de plantilla, pero ha insistido en que CaixaBank es «el mejor compañero de viaje».

Frente a las críticas, Goirigolzarri ha querido tranquilizar a varios de los accionistas, representantes de los trabajadores, que preguntaron por el impacto de la fusión sobre el empleo, y ha asegurado que las cifras están aún por definir y cuando la fusión sea una realidad se comunicarán a los sindicatos y comenzarán las negociaciones.

Más beneficio para el accionista

El banquero ha destacado que la entidad combinada prevé alcanzar en 2022 un nivel de 0,33 céntimos por acción, lo que supone un 28% más al que hubiera obtenido CaixaBank solo y casi un 70% al de Bankia.

La ecuación de canje ofrecida por Caixabank a Bankiaha sido de 0,6845 título de Caixabank por cada título de Bankia

La ecuación de canje ofrecida de 0,6845 acciones de Caixabank por cada acción de Bankia supone una prima sobre la cotización de Bankia el día del anuncio de la operación del 20%, o del 28% sobre la media de los tres meses previo, indicador más comúnmente utilizado.

En cuanto a la rentabilidad, en términos de ROTE o rentabilidad sobre el capital tangible, la entidad combinada podrá alcanzar un 8,2 % en 2022, muy superior al que alcanzarían las dos entidades de forma independiente, lo que permitirá distribuir mayores dividendos.

La fusión completa hasta 2022

Tras la aprobación de la fusión por parte de Bankia, ahora queda que los accionistas de Caixabank den su visto bueno a la operación este próximo jueves y luego hay que esperar a que en los primeros meses el Ministerio de Asuntos Económicos dé luz verde a la integración, para lo que necesita un informe previo del Banco de España, del BCE y de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Tal y como ha informado Goirigolzarri en la junta de accionistas, realmente la fusión final no sería una realidad hasta 2022, ya que hasta finales del año próximo no se cerrará la integración tecnológica.

A finales del primer trimestre la fusión podría culminar y el nuevo Caixabank, que será el nombre que va a mantener la nueva entidad bancaria, va a empezar el proceso de integración culminando así la integración tecnológica que está prevista para finales de 2021.

El nuevo grupo nacerá con la menor ratio de morosidad entre la gran banca española y con una de las mayores tasas de cobertura.

El nivel de capital de máxima calidad será del 11,6%, con un colchón de capital, después de los ajustes y de la integración, de más de 310 puntos básicos sobre el nivel regulatorio.

La entidad parte de una posición amplia de liquidez, con 128.000 millones en activos líquidos, «una inmejorable posición para seguir financiando a empresas y familias».