El Real Madrid recibe en el estadio Santiago Bernabéu, a una hora poco habitual para los blancos, como son las 14:00 horas, a un Osasuna con ganas de seguir poniendo el dedo en la llaga madridista. Los hombres de Carlo Ancelotti regresan a su casa, donde han recibido en los dos últimos partidos que han jugado siete goles. Cuatro del Barcelona y tres del Milan. La situación es límite y la entidad madridista sólo puede sumar los tres puntos si no quieren ver como las decisiones se precipitan.
Si el Real Madrid no gana a Osasuna el gabinete de crisis, ya formado en Valdebebas, se activará con un claro y, posiblemente, injusto damnificado: Carlo Ancelotti. Si los blancos no son capaces de sumar la victoria, la situación se convertirá en insostenible y el club ya sí que se plantearía seriamente tomar medidas. ¿Cuáles? Pues en estos casos el entrenador suele ser el eslabón más débil.
Nadie en el vestuario madridista quiere que la historia del mejor entrenador que ha tenido el conjunto blanco en su brillante historia acabe antes de lo deseado y de mala manera. Por ello, los jugadores y el italiano han vivido días tensos en los que han hablado y han hecho autocrítica. El objetivo ahora es que lo dicho surta el efecto deseado para que los blancos empiecen a reencontrarse con su mejor versión.
Y para ello, Ancelotti volverá a cambiar el dibujo. Sin Tchouaméni, lesionado, el italiano volverá a apostar por tres centrocampistas en la medular, por lo que en el ataque volverán a jugar tres delanteros. El tridente regresará con Rodrygo por la derecha, Vinicius por la izquierda y Mbappé como principal referencia ofensiva.
Osasuna cree en la sorpresa
Por otro lado, Osasuna viaja a Madrid con la ilusión de dedicar su victoria a su entrenador, un Vicente Moreno que regresó este viernes a Pamplona tras su estancia en su localidad natal, Massanassa, muy afectada por la DANA en Valencia. El osasunismo aguarda con altas expectativas la cita tras un comienzo liguero que pocos hubiesen imaginado después del adiós de Jagoba Arrasate. Con 21 puntos en la mochila, el futuro del curso se ve con la tranquilidad necesaria para intentar un asalto a la cancha del campeón.
La cómoda situación en quinta posición ofrece al equipo la posibilidad de mostrar su ambición tras la última victoria frente al Valladolid. De menos a más, la plantilla ha ido encajando para mostrar un eléctrico juego con Budimir y el internacional español Bryan Zaragoza como encargados de finalizar en área contraria.
El segundo entrenador, Dani Pendín, ha valorado sobre la vuelta de Moreno: «Es evidente la alegría que tenemos. Estamos contentos porque está mejor y es satisfactorio que haya venido porque es una persona que es el líder del equipo». El técnico valenciano, sancionado desde el partido contra la Real Sociedad con dos encuentros, no estará en el banquillo del coliseo blanco, siendo su segundo el encargado de dirigir a los navarros.
Osasuna acumula tres porterías a cero seguidas, con el 0-5 en Copa del Rey ante el Chiclana como última referencia. No encajar se presume básico para contar con opciones de alcanzar un resultado positivo. La buena campaña de Boyomo y Catena da confianza al resto.
Todos están disponibles. La enfermería rojilla se ha ido vaciando las últimas semanas con las altas de Kike Barja e Iker Muñoz. Este último fue titular en copa, por lo que Torró vuelve a contar con competencia en su puesto.
Real Madrid – Osasuna: posibles alineaciones
- Real Madrid: Lunin; Lucas Vázquez, Militao, Rüdiger, Mendy; Camavinga, Valverde, Bellingham; Rodrygo, Mbappé, Vinicius.
- Osasuna: Sergio Herrera; Areso, Catena, Boyomo, Bretones; Torró; Peña, Moncayola, Aimar, Bryan; Budimir.
