El Real Madrid vive horas de preocupación. No es para menos. Desde que Vinicius se echase la mano al muslo derecho al cuarto de hora del duelo que enfrentó a Celta y los blancos en Balaídos, en la entidad madridista no ha dejado de cruzar los dedos esperando que las pruebas médicas a las que el lunes será sometido el brasileño desvelen que la dolencia es lo más leve posible.
En el Real Madrid son plenamente conscientes que a poco que tenga en la parte posterior del muslo derecho le impedirá ser de la partida contra el Getafe. Ya lo advirtió Ancelotti tras el encuentro que enfrentó a Celta y Real Madrid. La parte positiva es que tampoco irá con Brasil para enfrentarse a Bolivia y Perú, ambos clasificatorios para el Mundial de 2026.
La mayor preocupación en el Real Madrid es que Vinicius se enfrenta a lo desconocido. El brasileño nunca ha sufrido una lesión muscular como profesional, por lo que no hay referentes médicos sobre su respuesta genética para este tipo de dolencia. Nadie sabe cómo responderá su cuerpo y cuánto tiempo tardará en estar al cien por cien de nuevo.
Por este motivo, desde el Real Madrid tienen claro que no jugará contra el Getafe el próximo sábado en el estadio Santiago Bernabéu. Luego, se quedará en Valdebebas recuperándose y, en estos momentos, está en el aire su presencia contra la Real Sociedad. El gran objetivo es que pueda ser de la partida en el derbi ante el Atlético de Madrid que se celebrará en el Metropolitano el 23 o 24 de septiembre.
Sólo una lesión como madridista
Desde que Vinicius es jugador del Real Madrid, sólo ha sufrido una lesión. Fue en marzo de 2019, cuando se rompió los ligamentos del tobillo derecho. Aquel encuentro ante el Ajax en la vuelta de los octavos de final de la Champions supuso el punto final a la temporada del brasileño. Su primera como madridista.
La pasada temporada, Vinicius se perdió dos partidos de Liga tras sufrir un golpe en la rodilla, aunque no fue grave y sí pudo jugar los 90 minutos contra el Athletic en el último partido del campeonato.
