Raúl González Blanco puede disputar su último partido en los banquillos del Di Stéfano este sábado. Para su penúltimo encuentro del Grupo 2 de la Primera Federación, el Real Madrid Castilla se medirá al Fuenlabrada. A falta de dos jornadas por acabarse la fase regular, el filial blanco sigue a la espera de un milagro. Solo cuatro puntos les separa del playoff de ascenso a Segunda División, pero no todo depende de ellos.
Entre los merengues y el Mérida, hay cuatro puntos, pero también están otros dos equipos en el medio. Los filiales del Sevilla y del Atlético de Madrid se encuentran a dos puntos del cuadro extremeño y, por ende, tienen una ventaja de dos puntos sobre el Castilla. Lo que está claro es que para creer en el milagro, Raúl González Blanco tiene que ganar. Sí o sí.
Además, podría ser su último encuentro en el Di Stéfano. Si el Mérida derrota al Recreativo de Huelva, los blancos podrán olvidarse del playoff de ascenso a Segunda División, ya que estaría matemáticamente sin posibilidades de llegar. Pero todo apunta a un adiós, ya que la leyenda blanca lo tiene hecho con el Schalke 04 alemán, donde también fue futbolista.
El Schalke espera a Raúl González Blanco
Según adelantó OKDIARIO el pasado 30 de abril, Raúl González Blanco ya tiene un acuerdo verbal para entrenar al Schalke 04 la próxima temporada, equipo que guarda un lugar especial en su corazón tras su paso como jugador. Salvo una oferta inesperada de última hora que modifique sus planes, el actual técnico del Real Madrid Castilla ha dado su palabra a los dirigentes de la entidad de Gelsenkirchen para liderar su nuevo proyecto.
El reto que afrontará no será sencillo. El histórico club alemán descendió la temporada pasada a la segunda división y su objetivo inmediato es recuperar la categoría perdida. La afición del Schalke mantiene un profundo cariño por la figura de Raúl, algo que sin duda facilitará su labor en el banquillo de un club sumido en dificultades deportivas en los últimos años.
Todos los caminos de Raúl conducen otra vez al Schalke, recalcando el vínculo emocional que une al entrenador madrileño con el club de Gelsenkirchen. Este no es el primer intento del cuadro alemán por contar con sus servicios como entrenador, pues ya se interesaron por él a mediados de la temporada pasada cuando el equipo mostraba claros síntomas de descenso.
La decisión de Raúl de aceptar la oferta del Schalke coincide con el final de su etapa como entrenador del Real Madrid Castilla, donde ha permanecido cinco temporadas. Esta campaña ha sido especialmente complicada para el filial madridista, que arrancó la temporada en Primera RFEF en puestos de descenso, muy lejos del objetivo de ascender a Segunda División. No obstante, acabó bien, y tuvo incluso una racha de 15 jornadas sin perder.
Muy pronto Raúl vio que su ciclo estaba muy próximo a finalizar y que esta debía ser su última campaña al frente del filial del Real Madrid. Esta percepción era compartida por la cúpula del club blanco. Y, según informó Eduardo Inda en noviembre pasado, «Raúl González Blanco tiene contrato hasta el 30 de junio de 2025 y el Real Madrid tiene decidido que no le renovará como entrenador del Castilla».
