Gonzalo (20 años) está hecho de oro. El capitán se lució en la manita del Real Madrid Castilla al Intercity. Con un espectacular hat-trick, dos goles de cabeza y un penalti, el ‘7’ se reafirmó en el filial. Después de un inicio de temporada frustrante, el ariete enseña el camino. El canterano ya cuenta con seis goles, de los cuales cinco fueron marcados en los últimos tres encuentros. El año pasado, el madrileño probó las mieles del primer equipo en dos ocasiones. El atacante pide paso.
Tras un arranque de temporada muy complicado para el Castilla, parece que el filial está empezando a sacar la cabeza. Después de un buen empate en casa del Atlético de Madrid ‘B’ el fin de semana pasado, el segundo equipo goleó al Intercity por 5-0. La última vez que los blancos enjaularon cinco goles en un partido, hay que remontar a febrero de 2024, contra el Real Murcia (5-1). Gracias a este importante triunfo, los merengues durmieron fuera del descenso del Grupo 2 de la Primera Federación.
La buena forma de Gonzalo llega como anillo al dedo a Raúl. El delantero también sufrió en el inicio de temporada. Contra el Betis Deportivo, en la jornada 4, el capitán falló un penalti. Esa pena máxima podría haber sido la autopista hacia el primer triunfo. Si hubiera entrado, Loren Aguado ponía el gol del 2-0 instantes después y el tanto de Destiny en el 87′ habría servido para salvar los honores de los béticos. Sin embargo, el destino pidió paciencia para el canterano.
Contra el Atlético Sanluqueño, Gonzalo no se encontraría con el gol, pero sí participó en los dos goles del Castilla. Con un doblete de asistencias, el capitán empezó a soltarse. Una semana más tarde, golazo contra el Hércules. Desde fuera del área, el atacante limpió por completo las telarañas de la portería alicantina y, por inercia, ofreció el primer triunfo del curso al filial. «Tenía que llegar el día en el que marcase. Nos alegramos todos que haya marcado, sobre todo cuando es un gol tan complicado viendo las otras situaciones que ha tenido», decía Raúl después del encuentro.
Desde aquel partido, Gonzalo es otro. Si luego el ariete tuvo que afrontar una sequía de tres partidos sin marcar, contra el Algeciras, segunda diana del curso. Cortesía de Víctor Muñoz. Contra el filial del Atlético de Madrid, ídem. Asistencia del 9, remata el 7. Los dos futbolistas son los dos amuletos de Raúl en la delantera. «Gonzalo y Víctor Muñoz son los jugadores más determinantes para nosotros en este inicio de temporada», confesaba el entrenador.
Raúl siempre ha confiado en sus delanteros. En el inicio del ejercicio y frente a las dificultades encontradas, el técnico madridista nunca escondió la falta de goles de los suyos, pero siempre transmitió positividad y confianza a sus delanteros. «Un día llegará y meteremos tres, cuatro goles. Cada partido es diferente», decía la leyenda madridista después del empate contra el Betis Deportivo.
Pues, contra el Intercity, cinco goles y portería a cero. Nada mejor para la confianza. Después de marcar dos goles en los dos últimos partidos, Gonzalo quería más. Él y Hugo de Llanos cocinaron la goleada del Castilla. El 26, con un doblete y el capitán con un espléndido hat-trick, el primero de su carrera profesional. Un gran suspiro para el filial. La semana que viene, vuelta al Di Stéfano contra el Antequera. En dos semanas, Derbi contra el Fuenlabrada.