Quedan solamente tres días para que se dispute una nueva final de la Champions League para el Real Madrid. Los blancos buscarán la Decimoquinta el próximo sábado, 1 de junio, contra el Borussia Dortmund en Wembley. En OKDIARIO continuamos con nuestra cuenta atrás en esta recta final y en este miércoles 29 de mayo recordamos la Tercera Copa de Europa conquistada por los blancos con un gol de Paco Gento en la prórroga en la final de la Champions de 1958.
El 28 de mayo de 1958, el Real Madrid conquistó su Tercera Copa de Europa consecutiva en las tres primeras ediciones del torneo. En el estadio de Heysel, en Bruselas, los blancos habían logrado que pareciese fácil llegar a las finales y ganarlas. Aquella final de la Champions de 1958 fue complicada, pero los blancos sacaron su carácter ganador para llevársela por 3-2 contra el Milan en la primera final que se decidió en la prórroga con un gol de Paco Gento.
Desde que la Copa de Europa arrancase en 1955, el Real Madrid era el gran dominador del torneo con tres títulos consecutivos. Los blancos avanzaron, siendo muy superiores, hacia aquella final de la Champions de 1958. Alfredo di Stéfano fue la gran estrella del torneo con 10 goles, convirtiéndose de esta manera en el máximo goleador.
Antes de medirse aquel 28 de mayo de 1958 al Milan en la final, el Real Madrid tuvo un rendimiento excelente en casa, donde no encajó ningún tanto y goleó al Royal Antwerp (6-0), Sevilla (8-0) y Vasas de Hungría (4-0). Frente a este último equipo, Di Stéfano saltó para celebrar uno de sus tres goles y la fotografía de ese instante pasó a la historia del madridismo.
Un Real Madrid campeón
El Real Madrid también conquistó la Liga esa campaña. Pudo lograr el triplete, pero cayó en la final de la Copa del Generalísimo frente al Athletic de Bilbao por 2-0. La final de 1958 coincidió con la Exposición Universal y la inauguración del famoso monumento Atomium de Bruselas, que a día de hoy es un símbolo de la ciudad belga. Los jugadores del Real Madrid fueron testigos en Budapest de uno de los avances tecnológicos aplicados al fútbol. El ‘Nep Stadion’ húngaro contaba con uno de los primeros marcadores electrónicos del mundo.
Tras la final, toda la prensa europea se volcó en alabanzas hacia el Real Madrid. «Di Stéfano es el mejor jugador del mundo; Gento, el más veloz y peligroso extremo izquierdo de Europa», señaló en su crónica el Daily Express.
Aquel Real Madrid dirigido por Luis Carniglia saltó al césped en la final de la Champions de 1958 con Alonso en portería, Atienza II, Santamaría y Lesmes II en defensa, Santisteban y Zárraga en el centro del campo, y arriba cinco delanteros con Kopa, Joseíto, Di Stéfano, Rial y Gento.
El Milan saltó con un once titular formado por Soldan, Fontana, Maldini, Beraldo, Bergamaschi, Radice, Danova, Liedholm, Schiaffino, Grillo y Cucchiaroni.
Un gol de Gento decidió la final
La final no fue nada sencilla para el Real Madrid, y es que el Milan le puso las cosas muy complicadas en Bruselas. En el minuto 59, Schiaffino adelantó a los italianos y puso las cosas muy complicadas. Hasta el minuto 74 no encontró el empate Alfredo di Stéfano.
Pero el final de partido en Bruselas iba a tener otro susto. En el minuto 77, el Milan se puso nuevamente por delante en el marcador con un tanto de Grillo (1-2). Afortunadamente para los blancos, demostrando su carácter ganador desde que se creó la Copa de Europa, Rial empató la final en Heysel dos minutos más tarde (2-2, 79′).
El partido se fue a la prórroga. Era la primera final de la Copa de Europa que llegaba al tiempo extra. Y en esa prórroga el héroe fue Paco Gento, uno de los jugadores más laureados en la historia del Real Madrid. Por segundo año consecutivo marcaba en una final. En el minuto 107 anotó el gol de la victoria frente al Milan. El portero Juanito Alonso también fue decisivo gracias a sus grandes paradas en los instantes finales. De esta manera, los blancos conquistaron su Tercera Copa de Europa para seguir haciendo historia en el mundo del fútbol.
