Bendito problema el que tiene Carlo Ancelotti en el centro del campo de cara a la próxima temporada. Siete jugadores, siete titulares, para tres o cuatro puestos. Todo dependerá de lo que pase con Kylian Mbappé, como casi todo para el Real Madrid en las próximas semanas. Modric, Kroos, Valverde, Camavinga, Tchouaméni, Ceballos y Bellingham conforman el que es posiblemente el mejor centro del campo del mundo. La medular madridista está llena a talento, experiencia y calidad. El italiano tiene opciones varias y deberá dar con la tecla para tener a todos contentos.
A lo que ya tenía el Real Madrid en el centro del campo, este verano se ha sumado la llegada de Jude Bellingham. Un talento generacional de 20 años que termina con la renovación del centro del campo madridista. Tras Valverde, Camavinga y Tchouaméni, la llegada del inglés asegura un centro del campo moderno y de quilates para la próxima década.
La juventud está garantizada en la medular del Real Madrid, pero también la experiencia para la próxima temporada. Kroos y Modric han renovado sus respectivos contratos una temporada más y Ancelotti lo celebra. Aunque la ley del fútbol diga que poco a poco su participación va a ser menor, dejando paso a la juventud de otros, para el italiano seguirán siendo piezas importantes y en las grandes noches seguro que tendrán su protagonismo.
¿Cambio de sistema?
Ancelotti tiene siete centrocampistas para tres o cuatro posiciones, dependerá de lo que pase con Mbappé. Si Kylian no llega este verano, algo que desde el Real Madrid ven bastante probable, la idea del italiano es cambiar el dibujo en su once tipo. Es decir, apostar por cuatro jugadores en la medular, dejando a Rodrygo y Vinicius como principales referencias ofensivas. En este dibujo, Camavinga y Tchouaméni pelearían por el pivote, Valverde formaría en el interior derecho, Kroos o Camavinga de interior izquierdo y Bellingham formaría en la punta más ofensiva del rombo de enganche y con la obligación de aportar llegada y goles.
Si el PSG accediese a vender a Mbappé y el Real Madrid llegase a un acuerdo para ficharle, el 4-3-3 se mantendría con un tridente ofensivo formado por Rodrygo, Vinicius y el galo, mientras que atrás los siete centrocampistas deberían pelear por tres posiciones.
