El Real Madrid júnior se proclamó este domingo campeón de la Euroliga sub-18 en Berlín y la celebración de los jóvenes jugadores del equipo blanco, así como de sus familiares, fue espectacular. En un encuentro decidido en la prórroga, el Real Madrid ganó por segunda vez este torneo que se celebró horas antes de la gran final de la Euroliga.
Con épica por el final espectacular que ocurrió, con una canasta ganadora en el último segundo, los jugadores del Real Madrid festejaron este título con cánticos y abrazos con sus familiares. La euforia se desató en los jóvenes jugadores, ya campeones de la denominada Adidas Next Generation Tournament al derrotar en la final al INSEP París.
Con cánticos de «campeones de Europa», los protagonistas de este triunfo festejaron a lo grande el título conseguido en Berlín, el segundo consecutivo por el equipo júnior del Real Madrid. Así, el filial blanco se llevó un partido muy disputado que Hugo González llevó a la prórroga con un triple a falta de 20 segundos. Ya en la prórroga, el equipo dirigido por Javier Juárez terminó haciéndose con el triunfo tras un emocionante encuentro.
El filial madridista no falló a su cita con la heroicidad y enlazó su segundo título de forma seguida. No dominó este año en el campeonato de España, pero sí en Europa. Demin fue el mejor de la final con una exhibición digna de un lugar en el primer equipo. El base ruso de 2,04 metros anotó 26 puntos en el día de Hugo González, que se marchó al descanso con 18 puntos y luego forzó la prórroga con un triplazo. El español le metió cabeza al asunto cuando más se demandaba y la otra gran estrella del futuro, Diagne, lo decidió todo con dos tiros libres en una de las últimas acciones.
Partido muy igualado en Berlín
La final enfrentó a los dos únicos equipos invictos de la competición y eso se reflejó en un partido de enorme igualdad que se decidió de forma tremenda en los últimos segundos. La intensidad fue máxima y las ventajas mínimas. Cuando todo parecía en contra (70-73 a 26,4 segundos del final), Hugo González volvió a aparecer con una canasta de tres antológica que ponía el empate a 73 y mandaba el partido a la prórroga tras un intento más de Traoré sobre la bocina que por poco no se coló. Los franceses volvieron a tomar la delantera en el tiempo extra, pero Bosnjakovic con otro triple y Hugo con un robo con canasta recuperaron la ventaja a 2:58 del final (78-77).
La final estaba en un punto caliente y la épica no podía ser mayor. Duru desató el éxtasis con un 2+1 a 34:7 segundos del final que dejaba a París al borde de la muerte, pero Boulefaa, el mejor de ellos (23 puntos), se la devolvió con un triplazo acto seguido (83-84, 18:0). Diagne cumplió con dos tiros libres en el último suspiro y a Traoré le entraron los nervios en el momento menos apropiado. Posesión perdida, intento fallido y título para el Real Madrid.