La simbólica paliza de Carlos Sainz a Hamilton: todo lo que pierde Ferrari con el cambio

La paliza de Carlos Sainz a Lewis Hamilton en el Mundial de Fórmula 1 2024 está siendo cuanto menos simbólica. A estas alturas del campeonato, al que sólo le faltan cinco Grandes Premios, el piloto español supera en 38 puntos al de Mercedes, que será precisamente quien le sustituya el año que viene. Actualmente, son quinto y sexto respectivamente, pero con el Ferrari a este nivel parece bastante improbable que el inglés pueda remontarle, o incluso acertarle.

En el contexto actual, quien lea estas líneas puede pensar que es lógica la victoria momentánea de Sainz a Hamilton en la clasificación, pero hay que recordar que durante varias fases del campeonato Mercedes fue bastante superior a Ferrari. Por tanto, alternándose el coche dominador, además de los McLaren y Red Bull, la realidad es que es el madrileño el que sale ganador de este enfrentamiento.

La constancia de Sainz es lo que le está llevando a derrotar a un Hamilton que ni con dos victorias (Austria y Bélgica) y cinco podios ha sido lo suficientemente regular como para imponerse al español. Este, por su parte, tiene un triunfo (Australia) y seis podios y encima ha disputado una carrera menos que él, la que se perdió en Arabia Saudí por apendicitis.

Pero en lo que respecta a los intereses de Ferrari, la temporada del español está siendo más que meritoria de un gran asiento, algo que probablemente no tendrá al marcharse a Williams a 2025. Sí que lo tendrá Hamilton en la clásica escudería de Maranello, aunque el pensamiento de que Charles Leclerc (tres victorias y diez podios en 2024) le dará una paliza en 2025 que viene es cada vez más extendido.

La marcha de Sainz y el futuro duelo Leclerc-Hamilton

De hecho, quienes mejor conocen al madrileño reconocen que la pareja que componen «Sainz y Leclerc es el mejor dúo que hay en los equipos de F1», algo a lo que Ferrari renuncia, además de a un gran ingeniero como es Carlos. Este siempre ha mejorado los equipos por los que ha pasado y el reflejo es cómo está ahora el italiano, el más rápido en Austin (Texas) y el que más opciones tiene de ganar las próximas cinco carreras, o el nivel al que llegó McLaren antes de irse.

Hace un mes, Sainz decía que si Hamilton «no hubiera querido terminar su carrera en Ferrari habría renovado, pero a un siete veces campeón del mundo no se le puede decir que no». «Lo entiendo, es una pareja que estaba destinada a juntarse y me ha tocado a mí. De hecho, Carlos sí que se colgará la medalla si el año que viene van bien las cosas en Maranello, pues «algo» de él «habrá contribuido».

«Si ves cómo estaba Ferrari cuando llegué yo y cómo está ahora, me enorgullece el progreso que se ha hecho por todo lo que hemos trabajado para llegar aquí», repasó. Su último objetivo es lograr una victoria más, pero sobre todo arañar el título de constructores, lo cual su entorno afirma que está «como loco» por conseguirlo antes de marcharse a finales de 2024.