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Los Grizzlies arrollan a Kobe en su posible despedida de Memphis

  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

Los Lakers viven en una travesía por el desierto. Si Kobe Bryant no existiese esta temporada no habría ningún motivo para seguir al segundo equipo más laureado de la historia de la NBA. Sin embargo, la presencia de la leyenda de la NBA, por muy mermado que esté, despierta un tremendo interés en los aficionados llenando las canchas allá por donde va el peor equipo de la Conferencia Oeste.

En Memphis, Kobe no tenía intención de jugar por unas molestias en la rodilla. Ese, al menos, era el plan hasta que vio el recibimiento de unos aficionados que se volvieron locos al ver al jugador. El escolta respondió a los vítores y ruegos de los fans vistiéndose de corto para disputar el que podría ser su partido de despedida –jugará otro en febrero– de la ciudad de Memphis.

Los Grizzlies, ante tanta solemnidad, dejaron que Kobe se luciera en el primer cuarto anotando 12 de sus 19 puntos. Sin embargo, el equipo de Marc Gasol no está para regalar triunfos (17-16) y en cuanto acabó el pseudo homenaje al legendario escolta encarrilaron el partido para no dar ninguna opción a su rival. El pívot español lideró el ataque de los suyos con 16 puntos y seis rebotes. Memphis se encuentra en un transición hacia el juego rápido y dinámico y los 116 puntos anotados evidencian un cambio. El equipo ocupa una cómoda sexta plaza de la Conferencia Oeste y será uno de los tapados en los playoffs.