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La indignación de Cristiano Ronaldo: gesto a la grada y no celebró los goles

Con el Rayo por delante en el marcador la pitada del Santiago Bernabéu hacia los jugadores y el entrenador fue todo lo ensordecedora que podía ser con la media entrada que había en el estadio. Fue en ese momento cuando Cristiano Ronaldo se enfrentó a la grada.

El luso pidió a los aficionados, haciendo un gesto de negación con la mano y el dedo índice levantado, que en lugar de silbar apoyasen al equipo cuando más lo necesitaba. El Real Madrid se veía desbordado ante un Rayo que había sido capaz de dar la vuelta al tempranero gol de Danilo.

Cristiano Ronaldo hizo un gesto al público.

En el minuto 30, Cristiano fue el encargado de materializar el penalti cometido por Raúl Baena sobre Sergio Ramos que envió al rayista al vestuario. El portugués es un seguro desde los once metros, de hecho ha marcado 49 de 54 lanzados en la Liga. Pese a que el gol suponía el de la remontada, el gesto del madridista no se alteró. Con cara de enfado entró en la portería para sacar el balón del fondo de la red y le dio una patada para enviarlo al centro del campo. Era como si tuviera ganas de más.

En plena goleada desvirtuada por las expulsiones, su rostro mostraba un cabreo de saber que no le había gustado lo sucedido en el arranque. Disparó al muñeco Yoel en el 49′, al que sí batió minutos después. Tampoco celebró Cristiano Ronaldo el segundo gol que marcó. Al igual que en el penalti, fue a por el balón dentro de la portería y le dio una patada. Después, se marchó a buscar a James para agradecerle la precisa asistencia que envió a la red con la cabeza.