Ni vinagre ni amoníaco: el ingrediente milagroso para dejar las ventanas impolutas

• Gemma Meca
• Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.
• • 12/01/2025 16:30
  • Actualizado: 12/01/2025 16:30

Hay un ingrediente milagroso para dejar las ventanas impolutas, no necesitas ni vinagre ni amoníaco. Los remedios naturales son esenciales en la limpieza de nuestra casa, cada vez más, dejamos una serie de productos químicos que pueden acabar siendo los que marquen una diferencia importante. Por lo que, habrá llegado el momento de empezar a pensar en un producto con el que se puede hacer casi magia con las ventanas impolutas, podrás conseguir una limpieza esencial sin necesidad de gastar de más.

Las redes sociales se han convertido en el elemento esencial para poder descubrir todos los trucos que tenemos por delante. Una serie de consejos que pueden acabar siendo los que marquen una diferencia importante. Tocará visualizar una serie de detalles que acabarán marcando una diferencia. En todos los sentidos, podemos empezar a preparar algunos elementos que serán los que marcarán la diferencia. Es hora de apostar claramente por una serie de elementos que pueden ser claves. Prepara este ingrediente milagroso que hará que las ventas de tu casa queden impolutas con el mínimo esfuerzo.

Ni amoníaco ni vinagre

El vinagre es uno de los ingredientes más usados en la limpieza de toda la casa. Lo podemos usar para crear una serie de elementos que son los que marcarán la diferencia y que nos aportará un brillo extra, además de una desinfección evidente.

El único problema que se deriva del uso del vinagre es el olor. Tiene un aroma característico que olvidamos cuando llega el recibo de lo que nos cuesta este elemento que se ha convertido en un básico. Es el low cost de la limpieza que no llega sólo.

Además del vinagre, también podemos usar el amoníaco para limpiar. Un producto con el que hay que tomar muchas precauciones. Empezando por abrir todas las ventanas cuando se usa ya que puede generar una serie de elementos que pueden acabar siendo lo que marque una diferencia importante en todos los sentidos.

Los trucos sobre limpieza nos han permitido conocer como dejar las ventanas como nuevas. Una de las zonas de limpieza que pueden acabar convirtiéndose en una pesadilla. Las ventanas son los ojos de la casa, deben estar lo más limpias posibles para poder ver el exterior y tener un interior libre de cualquier suciedad.

Si quieres conseguir una limpieza profesional, sólo debes conseguir un ingrediente que hará realidad lo que necesitas.

Toma nota del ingrediente milagroso para dejar las ventas impolutas

El agua y la sal son excelentes limpiadores, especialmente para las ventanas. Resultará tan fácil limpiarlas con un poco de sal que te parecerá imposible no haber descubierto antes esta forma de limpiar una de las partes más importantes de nuestra casa.

Este remedio natural puede eliminar las manchas más profundas. Teniendo en cuenta que tendremos que enjuagar bien los cristales para que no queden residuos, pero también ante un ingrediente que puede acabar siendo especialmente beneficioso y barato.

Desde el blog de sistemas24h nos dan una serie de trucos para limpiar las ventanas con un ingrediente natural como este. Siempre y cuando los debas hacer de tal forma que quizás te sorprenderá. Siguiendo estos pasos conseguirás que las ventanas te queden impolutas.

1. Una cucharada de sal en 1 taza llena de vinagre blanco.
2. Añade poco a poco harina y lo vas mezclando hasta formar una pasta.
3. Verifica que la pasta no dañe la superficie. Para ello, lo mejor es que hagas una pequeña prueba en una zona poco visible del alluminio.
4. Aplica la pasta en el metal con un paño.
5. Deja actuar, como mínimo, 15 minutos. Esto puede variar según la suciedad de la ventana y puede llegar hasta 1 hora para las áreas más sucias.
6. Enjuaga con agua tibia el aluminio blanca.
7. Sécalo con un trapo de tejido suave.

También puedes empezar a conseguir una limpieza tradicional de la mano de este tipo de forma de limpieza a base de amoníaco.

• Evita utilizar paños: lo más recomendable es emplear esponjas que no dejen pelusas en la superficie.
• Mezcla agua con un detergente suave: un producto muy fuerte puede estropear el aluminio blanco. Lo mejor es comenzar humedeciendo una esponja en agua con jabón y frotarla por los marcos del aluminio; de esta manera quitarás las manchas y desengrasarás todo el borde del vidrio.
• Humedece un paño y limpia los marcos: elige un producto que no suelte pelusas y quita el jabón hasta que el aluminio no tenga ningún tipo de detergente.
• Seca el aluminio: la mejor opción es utilizar papel de periódico o de cocina. Estos materiales no dejan rastro y absorben muy rápido la humedad.
• Usa detergente con amoníaco para las manchas incrustadas: mezclalo con agua y, utilizando unos guantes, humedece una esponja y aplícala donde esté la mancha. Para ello debes hacer movimientos circulares. Una vez eliminada puedes proceder a limpiar con un paño seco mojado en agua la superficie y, para finalizar, secarlo con papel absorbente.
• Manchas de solventes, pintura o grasa: en vez de utilizar amoníaco lo mejor es emplear una esponja humedecida en agua, vinagre y alcohol medicinal.
• Manchas que no desaparecen: si ninguna de las otras dos opciones funcionan siempre puedes optar por la cera para pulir coches. Para ello debes aplicar un poco de cera en la mancha y, si aun así no se elimina, lijar un poco la superficie.