Jamás lo habías imaginado: la razón por la que tienes que poner sal en la escoba

La escoba es uno de los utensilios de limpieza más utilizado en los hogares de todo el mundo, un clásico desde hace varias décadas y que aunque en los últimos años se ha dejado un poco de lado con la llegada de los robots de limpieza, lo cierto es que sigue resultando muy útil para dejar el suelo limpio. Te descubrimos un trucazo de poner sal en la escoba cuando vayas a pasarla en tu hogar, y te contamos por qué tienes que ponerla… ¡vas a flipar!.

El mundo de la limpieza está rodeado de un sinfín de trucos, tanto en las redes sociales como en los cerebros de las abuelas, y es que sin duda ellas son las que más controlan de este tema y las que siempre tienen un buen remedio que sacarse de la manga.

Por este motivo debes poner sal en la escoba para barrer

Uno de los remedios de limpieza más antiguos es poner sal en la escoba para barrer, muy conocido por muchos pero también desconocido por la gran mayoría, e incluso quienes lo conocen no tienen ni idea de por qué añadir este ingrediente. La sal es un ingrediente muy útil en el hogar, y se le puede sacar partido para mucho más que para salar la comida, tanto que puede llegar a ser un gran aliado en diferentes tareas de limpieza. La sal tiene un grandísimo poder limpiador que puedes aprovechar al máximo en el hogar.

Con este truco se puede limpiar el suelo a la perfección, además de lugares como el plato de la ducha, ya que será perfecta para eliminar los depósitos de cal y la humedad. Superficies como baldosas y espejos volverán a brillar, relucientes, recuperando así su esencia perdida, y todo sin tener que recurrir a productos químicos y agresivos que puedan dañarlos, tan sólo añadiendo sal a la escoba… ¡increíble!.

Cómo poner sal en la escoba para barrer

1. Lo primero que necesitas es preparar una solución a base de agua, sal y vinagre, por ejemplo, prepara medio cubo de agua y añade un vaso de vinagre y 3-4 cucharadas de sal. Mezcla bien para que se integren todos los ingredientes.
2. Sumerge la escoba en el cubo y deja que se empape de la solución durante unos 5-6 minutos.
3. Pasado ese tiempo, saca la escoba del agua y pásala por las superficies que quieres limpiar, la suciedad se eliminará completamente en la primera pasada.
4. Una vez que has barrido con la escoba impregnada en sal ya podrás fregar como haces habitualmente, y verás que los resultados son realmente asombrosos.