Cataluña
Senado

Aragonés se burla de Sánchez en el Senado: «La amnistía era inevitable, como lo será el referéndum»

"La amnistía era inconstitucional hasta que conseguimos que se cambiara de opinión", señala

El de ERC cree que la norma "es inevitable como lo van a ser la financiación singular y el referéndum"

El presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, se ha burlado del jefe de Gobierno nacional, Pedro Sánchez, diciendo que «la amnistía era inevitable, como lo será el referéndum». El líder de la autonomía catalana ha acudido a la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado, en el que ha defendido la medida de gracia ante la cámara con mayoría popular y ante los presidentes autonómicos del PP.

Aragonés ha recalcado que la norma con la que se eliminan los delitos para los políticos condenados por su responsabilidad en el procés «era inconstitucional hasta que conseguimos que se cambiara de opinión». «La amnistía es inevitable como lo van a ser la financiación singular y el referéndum», ha sentenciado el presidente catalán en la Cámara Baja.

«La amnistía, de la noche a la mañana, dejó de ser inconstitucional, dejó de ser imposible, como sucederá con el referéndum», ha incidido el jefe del Ejecutivo autonómico. Aragonés ha considerado que la consulta «más tarde o más pronto, será aceptada como la vía para resolver el conflicto de soberanía entre Cataluña y el Estado».

Aragonés ha argumentado que la Ley de la Amnistía es la «vía para reparar gran parte del dolor causado por la represión», que, en opinión del líder independentista, ocurrió durante el referéndum del 1 de octubre de 2017 declarado como ilegal por el Tribunal Constitucional. Una acción policial que Aragonés cree que la sociedad catalana no perdonará «jamás», así como «los años de exilio y de cárcel», en alusión a la pena cumplida por los políticos secesionistas condenados por sedición y malversación por el Tribunal Supremo.

Mientras consigue el referéndum, Aragonés ha expresado que es necesario «hacer posible un sistema de financiación singular para Cataluña». La idea de ERC es tener «un sistema de financiación propio» porque se ha quejado el presidente de la Generalitat de que «el actual sistema de financiación es una losa insoportable para Cataluña, obsoleto, opaco y, sobre todo, injusto».

Reunión de presidentes autonómicos

El Senado ha reunido este lunes a la Comisión General de Comunidades Autónomas a propuesta del PP, formación que cuenta con la mayoría absoluta en la Cámara Alta. El principal objetivo de este organismo que se da cita este lunes será el de aprobar un informe sobre el impacto autonómico de la amnistía. En su texto se reflejará que la medida de gracia «deja desprotegido el Estado de las Autonomías al sentar un precedente peligroso para su propia supervivencia».

Ningún miembro del Gobierno de Pedro Sánchez ha participado en el debate que se celebra en el Senado en relación con la Ley de Amnistía. Aragonés, por tanto, ha sido el primer en hacer uso de su turno de palabra. Tras él, hablarán el vicepresidente de la Xunta de Galicia, Diego Calvo; un representante de la Junta de Andalucía; otro del Gobierno de Cantabria; un consejero del Ejecutivo de La Rioja; el presidente de la Región de Murcia, Fernando López Miras; el presidente de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón; el presidente de Aragón, Jorge Azcón; el consejero de Educación de Canarias, Poli Suárez; la presidenta de Extremadura, María Guardiola; la consejera de Presidencia de Baleares, Antonia Maria Estarellas; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.

El jefe del Gobierno autonómico catalán ya avisó el pasado jueves de que se enfrentaría a una cámara que consideraba «hostil» porque «como independentista, republicano y de izquierdas, trolear al PP siempre apetece».

«A mí no me da miedo, creo que la amnistía es necesaria para acabar con la represión que en su día incentivó de forma muy clara al Partido Popular», confesó la semana pasada el político de ERC. Además, expresó que con su discurso pretendía acabar con el a por ellos» y evitar que se hiciera un uso partidista de una sesión que «el PP quería convertir en un aquelarre contra el Gobierno español».

Ante el Senado de mayoría popular Aragonés anunció que acudiría a «sobre todo defender el proyecto de amnistía» porque, en su opinión, esta tarea «se debe hacer en todos lados».