La abogada de Trapero rompe a llorar para tratar de convencer al tribunal de su inocencia en el 1-O

Olga Tubau, la abogada del ex mayor de los Mossos Josep Lluís Trapero ha roto a llorar al acabar la exposición de su informe de conclusiones del juicio para tratar de convencer a la Audiencia Nacional de su inocencia en el referéndum ilegal del 1-O en Cataluña. Esta exposición ha durado más de nueve horas repartidas entre los dos últimos días. La letrada ha solicitado una sentencia absolutoria para el máximo responsable de la policía autonómica catalana durante el golpe independentista.

La abogada ha agradecido al tribunal, presidido por la juez Concepción Espejel, que se haya «respetado de forma profunda los principios de igualdad de armas y de contradicción». El juicio comenzó el pasado 20 de enero en la Audiencia Nacional y fue interrumpido poco antes de su final debido a la pandemia del coronavirus. A Josep Lluís Trapero se le acusa de un delito de sedición por el golpe separatista de 2017.

Olga Tubau ha explicado también que al ejercer sobre todo en Cataluña, no suele ir mucho a la Audiencia Nacional, si bien ha manifestado que estará «encantada de volver a esta casa», tras lo cual ha tenido también unas palabras para los fiscales Miguel Ángel Carballo y Pedro Rubira por su «deferencia profesional» y en concreto hacia su persona.

Ha sido en ese instante cuando la abogada de Trapero se ha quedado callada durante unos segundos y se ha mostrado visiblemente emocionada. Entre lágrimas, ha querido leer una cita del jurista Alonso Martínez: «Un ciudadano de un pueblo libre no debe expiar las faltas que no son suyas ni ser víctima de la impotencia y egoísmo del Estado. Y esto es algo que los tribunales deben evitar».

Tubau ha solicitado al tribunal que «eviten» que Josep Lluís Trapero no sea «víctima de la impotencia y egoísmo del Estado» con una «sentencia absolutoria» para el mayor de los Mossos. También lo ha reclamado para su otra defendida, la intendente de la policía autonómica catalana Teresa Laplana.

La Fiscalía pide una condena de 10 años de cárcel para Trapero y otra de 4 para Laplana, ambos por un delito de sedición por su participación en el proceso separatista catalán que culminó en el 1-O. Como alternativa, el Ministerio Público plantea que sean condenados por desobediencia.

«Indispensable» en el 1-O

Miguel Ángel Carballo, fiscal de la Audiencia Nacional, acusó a Trapero de sedición por autoría directa porque la actuación de la policía autonómica fue «indispensable para la comisión de los delitos» cometidos en el proceso independentista catalán y para dar «una apariencia de institucionalidad y legitimidad» al referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.

Carballo consideró que los Mossos d’Esquadra actuaron con «tibieza» y hubo una «dejación consciente y voluntaria» de sus obligaciones. «Era evidente que no había ningún deseo real de evitar el 1-O», afirmó, para añadir que el «mantra» que han utilizado sus mandos acerca de que la prioridad era ejercer con «proporcionalidad» y mantener la paz social fue únicamente una «excusa».

Así lo puso de manifiesto el fiscal durante la exposición de su informe de conclusiones definitivas, en el que solicita 10 años de prisión para Trapero por sedición, aunque también propuso una alternativa por delito de desobediencia, que no conlleva pena de cárcel.

El fiscal también puso en duda el plan para detener al Govern de Carles Puigdemont del que Trapero ha hablado tanto en este juicio como en el del Tribunal Supremo que condenó a los líderes políticos y sociales, y relacionó su ascenso a mayor de la policía autonómica con la «confianza» que mostraron en él los dirigentes políticos para poder llevar a cabo sus planes independentistas.

Con todo esto, el ex mayor de los Mossos d’Esquadra podría no entrar en prisión como los líderes separatistas que perpetraron el golpe del 1-O. La Fiscalía de la Audiencia Nacional rebajó su acusación contra Josep Lluís Trapero de un delito inicial de rebelión a uno de sedición por el que pide una condena de 10 años de prisión.