La Policía derriba la muralla de chatarra de Son Banya que los narcos levantaron para fortificar el poblado
El fortín de dos metros de alto está realizado con materiales como coches quemados, plásticos, tierra, ruedas o colchones
Se retirarán unas 4.000 toneladas de escombros y sólo este miércoles se llenarán de basura hasta 50 camiones
La Policía Nacional ha irrumpido este miércoles en Son Banya (Mallorca) para derribar la muralla de chatarra de unos dos metros de alto que los narcos levantaron para fortificar el poblado chabolista y protegerse de las redadas. Desde las 9.15 horas de esta mañana, los operarios está retirando las toneladas de basura y escombros como coches, tierra y plásticos que rodean el asentamiento.
Según han informado desde el Ayuntamiento de Palma, este mismo miércoles se llenarán hasta 50 camiones contenedor de escombros con 20 toneladas cada uno. El fortín realizado de manera ilegal está formado por todo tipo de materiales como coches quemados, bidones, colchones, tierra vegetal o ruedas, un hecho que dificulta los trabajos de desmantelamiento de esta línea de defensa de los narcotraficantes.
En total se estima que se retiren unas 4.000 toneladas de basura y demás chatarra con una pala excavadora gracias a unos trabajos que podrían durar hasta el sábado. En la intervención han participado la Policía Nacional a través de la Unidad de Prevención y Reacción, la Policía Local de Palma (Unidad de Intervención de Inmediata UII) y los departamentos de Infraestructuras, Bienestar Social y Emaya.
Dicho derribo ha descubierto tres puntos de venta de droga en edificaciones ilegales construidas de forma rudimentaria, aunque no se encontraba ninguna persona en el momento de la intervención, por lo que no hay detenidos. También se ha intervenido cerca de medio kilo de cocaína, así como marihuana y hachís, además de diversos útiles relacionados con la preparación de droga y dinero en efectivo.
El objetivo que tiene los residentes del poblado palmesano de Son Banya con esta gran muralla de unos dos metros de alto aproximadamente es impedir o retrasar la entrada de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el poblado para que los traficantes tengan tiempo de esconder la droga de los puntos de venta.
Anteriormente, este asentamiento, conocido por ser el supermercado de la droga en Mallorca, ya contaba con las primitivas defensas y barricadas improvisadas de piedras repartidas por las vías de acceso al poblado para protegerse de las redadas antidroga, aunque nunca llegaban a la altura y contundencia de las que desde hoy rodean la barriada.
La última redada en Son Banya
Cabe recordar que la última redada antidroga en el poblado narco de Son Banya se produjo hace tan sólo tres meses. Un dispositivo policial integrado por agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional y de la Policía Local de Palma irrumpieron en el asentamiento, junto a técnicos municipales y operarios, para derribar unos vallados que los narcos habían instalado ilegalmente en el interior de la barriada.
En concreto, los operarios quitaron un cercado con cierre perimetral donde había animales, retiraron un sistema de luces y subsanaron otras irregularidades como la retirada de barreras metálicas que hacían el papel de barricadas.
Asimismo, se derribaron cuatro edificaciones artesanales ilegales que funcionaban como cuatro puntos de venta con droga. Al descubrirlo, los agentes de la UPR han comisionado a los agentes de Estupefacientes de la Policía Nacional para llevar a cabo una investigación.
Como de costumbre, se intervinieron diversas sustancias estupefacientes como cocaína, marihuana y hachís, así como diversos útiles. En los puntos de venta no se encontraba ninguna persona en el momento de la intervención por lo que no se produjeron detenciones.