Cercanos a Sánchez aseguran que no lo pueden defender más y no lo ven como candidato

Pedro Sánchez-PSOE-PP-Rajoy
Pedro Sánchez y otros dirigentes socialistas durante la reunión del Comité Federal (Foto: Efe)

El ‘Sanchismo’ hace agua incluso entre sus fieles y, ante la que se avecina, algunos optan discretamente por abandonar el barco. Así, fuentes cercanas al líder socialista tiran la toalla diciendo: «No lo podemos defender más». Ninguno de ellos quiere dar su nombre pero son conscientes que esta crítica «será rastreada por la dirección del partido».

Tras la ruptura de Podemos en las negociaciones con PSOE y Ciudadanos, dan por zanjados los contactos para formar Gobierno y hablan de elecciones en junio: «Es evidente que nada suma y, aunque Rajoy llame a Sánchez, de nada va a servir», insisten. «Todavía es muy pronto para hablar de encuestas y de que cunda el pánico en general», continúan. Pero lo cierto es que el último CIS refleja un panorama político similar al que arrojaron las urnas, con la diferencia de que Podemos y las confluencias ya superan ligeramente al PSOE. La primera fuerza seguiría siendo el PP con el 28,8% de los votos, frente al 28,72% que logró el 20D, según el último sondeo.

El pesimismo se ha instalado en las federaciones territoriales, entre las que no salen las cuentas y preguntan con insistencia: ¿Y ahora qué? Critican la «desinformación» de la dirección y hablan del ‘día de la marmota’ y del temor a que en unas eventuales elecciones anticipadas vuelva a suceder una catarsis como la que ocurrió en diciembre tras obtener el peor resultado del partido en toda su historia. «Esta vez sería mucho peor y dejaría al partido para el arrastre», comentan con nerviosismo.

Por ello, los críticos hablan de dos estrategias: la primera sería cerrar filas en torno a Sánchez y dejar que se ‘estrelle’ con unos pésimos resultados. De esta manera, se seguiría apoyando al líder socialista elegido por primarias y se enterrarían los líos internos. La parte negativa sería que «el partido no se puede permitir un suelo más bajo», insisten.

La segunda opción, por la que algunos barones están optando, consiste en ‘presionar’ a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, para que, en lugar de plantar cara a Sánchez en el Congreso, adelante su llegada y opte por las primarias para ser la nueva candidata. «Susana tiene incontables apoyos y un mensaje nuevo que el PSOE necesita en estos momentos», insisten fuentes críticas. Todos ellos en su momento apoyaron a Sánchez pero aseguran que «ya no lo vemos como candidato. Nos pasa a muchos porque, quizá, se ha quemado mucho con las negociaciones».

Zapatero ya prevé nuevas elecciones

Una de las voces que anima a Díaz a presentarse es el ex presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Ambos mantuvieron una reunión el pasado sábado tras el Comité Federal e intercambiaron impresiones de cómo se habían desarrollado los últimos acontecimientos en el partido.

Zapatero ha dicho este lunes que cada vez ve más cerca la repetición de las elecciones generales, aunque no lo da por hecho porque hay que respetar los tiempos. En un acto en Ávila, el ex presidente ha reconocido que «las cosas cada día más van en esa dirección» ante la falta de acuerdos entre las fuerzas políticas.

Asimismo, ha advertido de que gobernar España con un Ejecutivo que necesita mayoría parlamentaria no es lo mismo que gobernar ayuntamientos o comunidades autónomas. «Es muy distinto», señaló.

Preguntado sobre si descarta una gran coalición entre PP y PSOE, ha dicho que es «bastante evidente», ya que existe un «problema de partida» ante una «dificultad casi absoluta para que haya un entendimiento» entre ambos partidos. Al respecto, ha querido dar un «consejo no pedido», ya que desde su punto de vista «para llegar a acuerdos en el Parlamento, hay que crear las condiciones durante mucho tiempo, porque no es una tarea de hoy para mañana, ni de un mes», después de un periodo de «confrontación intensa». Ante esta situación, ha abogado por «bajar el tono de confrontación un escalón». No respondió a los periodistas que le preguntaron: El PSOE, ¿con o sin Sánchez?

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