A una hora de Madrid hay una cueva de un millón de años abierta al público
Las Cuevas del Águila albergan galerías adornadas con estalactitas y estalagmitas
Este precioso pueblo a una hora de Madrid esconde una desconocida ciudad romana
Las impresionantes Cuevas del Águila, situadas al sur de la provincia de Ávila, en el corazón del Valle del Tiétar, tienen aproximadamente un millón de años. Esta extensa área está compuesta por calizas cristalinas muy plegadas, que la erosión del aire y el agua ha reducido a cerros de poca altura que se elevan sobre los ríos Arenal y Avellaneda.
El descubrimiento de las cuevas en 1963 fue completamente accidental. Posteriormente, después intensos trabajos de acondicionamiento, las cuevas se abrieron al público un año después. Entre las maravillas que se pueden observar en la Gran Sala de la Caverna, se encuentran formaciones asombrosas como columnas, estalactitas, gours y multitud de capas de arcilla.
Cuevas del Águila
Las impresionantes Cuevas del Águila son una verdadera maravilla natural que destaca como uno de los tesoros geológicos de Ávila. Estas cuevas ofrecen un recorrido único, accesible en su mayoría, y se encuentran en excelente estado de conservación para que los visitantes puedan disfrutarlas en su totalidad.
Con una profundidad de 50 metros y un trayecto de aproximadamente 1.000 metros, las Cuevas del Águila ofrecen un viaje fascinante a través de galerías adornadas con estalactitas y estalagmitas de diferentes formas y colores. La iluminación cuidadosamente diseñada resalta la belleza de las formaciones de piedra caliza, creando un espectáculo visual que te dejará sin aliento.
Las visitas a las cuevas se realizan con intervalos de media minutos y están guiadas por un vigilante durante un recorrido de alrededor de 40 minutos. La temperatura en el interior de las cuevas se mantiene constante alrededor de los 17 grados durante todo el año, con una humedad cercana al 100%.
La morfología de estas cuevas es el resultado de procesos geológicos milenarios, donde filtraciones de agua de lluvia y corrientes subterráneas dieron forma a una variedad de espeleotemas, como estalactitas, estalagmitas, gours y coladas. Los expertos calculan que cada espeleotema crece apenas un centímetro cada 150 años.
Historia
Hace millones de años, en la era Paleozoica, estas cuevas se formaron en calizas atribuidas al Cámbrico inferior, hace unos 500 o 540 millones de años. Un periodo en el que los trilobites dominaban la tierra, mucho antes de la aparición de los seres humanos.
El 24 de diciembre de 1963 cinco jóvenes que exploraban el Cerro de Romperropas hicieron un descubrimiento asombroso: un agujero del cual salía vapor de agua. Intrigados, decidieron adentrarse con la ayuda de cuerdas y linternas por lo que parecía una estrecha gatera, apenas de 60 cm de diámetro.
Tras un descenso de unos 50 o 60 metros, gateando, llegaron a una impresionante bóveda principal. Perdidos durante casi cinco horas en su interior, finalmente lograron encontrar la salida. Este hallazgo desencadenó una serie de eventos que llevaron a la apertura al público de las Cuevas del Águila desde el 18 de julio de 1964, tras intensos trabajos de acondicionamiento y la notificación a las autoridades y expertos.
Visita
A poco más de una hora en coche desde Madrid, tienes la oportunidad de descubrir las Cuevas del Águila y sumergirte en un mundo subterráneo fascinante. Estas cuevas esconden secretos que te dejarán sin palabras. A pesar de estar rodeadas por un exuberante bosque de encinas, la roca caliza que las conforma permanece oculta a simple vista, lo que hace que la experiencia sea aún más sorprendente.
La visita a las cuevas se realiza a pie, por lo que se recomienda llevar calzado adecuado debido al alto grado de humedad en el interior. A la entrada, encontrarás paneles de interpretación con información adicional para enriquecer tu experiencia.
Un experimentado vigilante o guía te acompañará en este viaje por el fascinante mundo subterráneo, ofreciéndote detalles sobre el descubrimiento, la formación y la singularidad de esta impresionante cavidad kárstica, única en el centro de la Península Ibérica.
El precio de la entrada es de 10 € para adultos y 8 € para niños (de 6 a 10 años), disponibles para su compra tanto en nuestra página web como en el lugar mismo. Los niños menores de 5 años tienen entrada gratuita. Además, ofrecemos precios especiales para grupos de más de 20 personas, a 8 € por persona.