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Un okupa de Ribeira amenaza a un reportero de ‘Vamos a ver’: «¡Soy muy peligroso!»

Los residentes de Ribeira, A Coruña, hartos de los conflictos entre okupas

Este miércoles 17 de julio, en Vamos a ver, uno de los reporteros del programa ha sido amenazado por un okupa. Ha sucedido en el barrio de Ribeira, en A Coruña, donde los vecinos ya no pueden más. Están cansados de los continuos conflictos con los okupas, de la inseguridad que se ha instalado en el barrio y de cómo el tráfico de drogas y los robos han aumentado. Cuando el equipo del espacio de Mediaset se ha acercado a los okupas y uno de ellos no ha tenido reparos en amenazar al periodista: «No nos gustan las cámaras aquí. Yo hago de todo… bebo y me drogo cuando puedo. Soy muy peligroso. Normalmente soy pacífico, pero si me encienden me vuelvo peligroso». Esta situación no es nueva. Durante el último mes de mayo, otro reportero de Vamos a ver fue agredido por unos okupas en el barrio madrileño de Vallecas.

Conflicto en Ribeira

Los vecinos del barrio de Ribeira, en A Coruña, ya no pueden más. Están cansados de los continuos conflictos con los okupas, de la inseguridad que se ha instalado en el barrio y de cómo el tráfico de drogas y los robos han aumentado. Además de tratarse de un edificio okupado, se ha comprobado que se trata de un punto de venta de droga. «Tenemos miedo. Hay mucha inseguridad», se quejan algunos de los vecinos con los que un equipo de Vamos a ver ha podido hablar.

Un okupa amenaza a un reportero de ‘Vamos a ver’.

Tensión con los okupas

Al ver a los cámaras, los okupas se sienten incómodos y lanzan varios objetos para tratar de echarlos fuera. Los vecinos llevan así cuatro años y no ven que el problema pueda solucionarse a corto plazo.

El equipo del programa producido por Unicorn ha podido hablar con uno de estos okupas, quién no dudó en amenazar: «No nos gustan las cámaras aquí. Yo hago de todo… bebo y me drogo cuando puedo. Soy muy peligroso. Normalmente soy pacífico, pero si me encienden me vuelvo peligroso».

Acto seguido, el okupa ha añadido que: «La gente peligrosa es la que viene a drogarse aquí. Hay peleas solo cuando nos faltan al respeto. Si la gente no busca aquí la droga, van a ir a buscarla a otro sitio. Los vecinos ya están acostumbrados».