Sociedad

El Papa se disculpa por haber «perdido la paciencia» con la mujer que le agarró el brazo

El papa Francisco se ha disculpado este miércoles, antes de la tradicional oración del Ángelus, por haber «perdido la paciencia» la víspera cuando una fiel lo forzó a darle la mano y él le dio un golpe en el antebrazo.

«Tantas veces perdemos la paciencia. A mí también me ocurre. Me disculpo por el mal ejemplo dado ayer», declaró el pontífice, desde una ventana del palacio apostólico de la plaza de San Pedro del Vaticano.

En las imágenes retransmitidas en directo por la cadena de televisión del Vaticano, Vatican News, se aprecia cómo una mujer tira con fuerza del brazo a Francisco, de 83 años, que casi pierde el equilibrio mientras estaba saludando uno a uno a los fieles que estaban apostados en las vallas instaladas delante del pesebre instalado en la Plaza de San Pedro.

Acto seguido el Pontífice, se ha zafado de la mujer y la ha reprendido golpeándole la mano visiblemente enojado, mientras sus agentes de seguridad se han acercado hasta las inmediaciones de las vallas, pero finalmente no han tenido que intervenir.

Posteriormente, Francisco ha celebrado la homilía de la Misa que ha celebrado este primer día del año, cuando la Iglesia celebra la 53 Jornada Mundial de la Paz que abre el 2020 con la denuncia de que las guerras comienzan «por la intolerancia a la diversidad del otro, que fomenta el deseo de posesión y la voluntad de dominio».

En el texto que dirige a los jefes de Estado y de gobierno de todo el mundo, el Papa sitúa el origen de los conflictos en «el odio que instiga a destruir, a encerrar al otro en una imagen negativa, a excluirlo y eliminarlo».

En su primera homilía del año, el Pontífice también ha hecho hincapié en uno de los temas que han definido su pontificado: los flujos migratorios. En este sentido, ha lamentado que haya madres que se «arriesgan a emprender viajes penosos para tratar desesperadamente de dar un futuro mejor al fruto de sus entrañas, y que son consideradas como números que sobrexceden el cupo por personas que tienen el estómago lleno, pero de cosas, y el corazón vacío de amor».