Karlos Arguiñano revela su truco definitivo para picar cebolla sin derramar una sola lágrima

• Gemma Meca
• Licenciada en Historia, máster en Periodismo y Comunicación Digital. Redactora en Ok Diario. Cuento historias, soy amante de los astros, sigo a la luna, los TT de Twitter y las tendencias en moda. Experta en noticias de consumo, lifestyle, recetas y Lotería de Navidad.
• • 20/03/2025 15:00
  • Actualizado: 20/03/2025 15:00

El experto Karlos Arguiñano revela su truco definitivo para picar una cebolla con total seguridad, sin derramar una sola lágrima. Este gran enemigo de nuestra cocina que es un básico de todas las salsas acaba desapareciendo por completo, de la mano de una serie de elementos que serán los que marcarán una diferencia importante. Sin duda alguna, habrá llegado el momento de intentar crear algunos elementos que serán los que nos acompañarán en estos días que tenemos por delante y que pueden ser claves para conseguir implementar este truco que nos será de lo más útil.

Las salsas de tomate más deliciosas o ese clásico de los de toda la vida, una buena tortilla de patatas con un toque de cebolla, como mandan los más amantes de este plato. Ese sofrito que queremos crear de la mano de una serie de elementos que pueden ser esenciales, todo es posible, con la llegada de una combinación de sabores que parte de una buena base, esa cebolla que puede convertirse en este tipo de elementos que puede llegar a ser claves en estos días que tenemos por delante. Gracias a Karlos Arguiñano no volveremos a llorar más sin motivo alguno.

El truco de Karlos Arguiñano que nos cambiará la vida

Nos cambiará la vida esta manera de cocinar que puede ser lo que nos haga conocer los secretos de uno de los mejores cocineros de nuestro país. Sin duda alguna, Arguiñano es uno de los más conocidos, pero también, de los más enfocados en una serie de cambios que pueden ser claves.

Estos días en los que necesitamos empezar a prepararnos para dar un giro radical de la mano, de una transformación que pasa por prestar más atención a algo tan importante como la cocina. Todo lo que preparamos en casa, puede acabar teniendo un extra de salud, aunque cueste un poco más hacerlo.

La cebolla es quizás uno de los ingredientes que no podemos dejar escapar de cualquier cocina. Descubriremos con ella, que se puede conseguir realmente una base de casi cualquier salsa o preparación. Para hacerlo nada mejor que esta combinación de elementos que pueden ser los que marcarán esta mezcla esencial que queremos conseguir.

Arguiñano nos enseña algo tan simple como cortar una cebolla sin que se derrame una lágrima. Nunca más vamos a llorar con este truco tan especial.

Vas a picar una cebolla sin derramar una lágrima

Una de las formas de evitar las lágrimas a la hora de cortar una cebolla pasa por poner este ingrediente en la nevera y de esta manera conseguiremos hacer realidad ese importante cambio que quizás hasta ahora no hubiéramos ni esperado. Con un simple truco que puede cambiarlo todo, esa forma de poner una cebolla en el congelador que hará que a la hora de cortarla no nos piquen los ojos.

Con unos 10 o 15 minutos es suficiente, no será necesario dejarla durante demasiado tiempo o lo que conseguiremos es que sea muy complicado picarla, incluso peligrosa. Te proponemos una receta de lo más especial, una buena cebolla caramelizada ideal para coronar, decorar o añadir un punto de sabor a bocadillos, carnes, pescados y verduras.

Ingredientes:

• 2-4 cebollas amarillas o blancas
• 2 cucharadas de aceite de oliva virgen
• 1 cucharadas de vinagre balsámico de Módena
• ½ cucharadita de bicarbonato

Elaboración:

1. Estas cebollas caramelizadas son una delicia saludable. Al contrario que muchas otras recetas que añaden azúcar, vamos a utilizar el propio dulzor de este ingrediente. La elección del mejor tipo de cebolla será el que marque la diferencia en esta preparación tan destacada.
2. Pelamos las cebollas y las cortaremos en trocitos del mismo tamaño. Podemos usar cebollas amarillas que son las más recomendables, aunque si no tenemos la segunda opción son unas cebollas blancas. Ambas pueden quedar de maravilla, pero con la segunda tendremos que ser un poco más pacientes, le costará un poco más llegar a ese punto de caramelización deseado.
3. Ponemos en una sartén un buen chorrito de aceite. Colocamos las cebollas con un poquito de sal para que se vayan cocinando poco a poco. Es importante para que se caramelicen bien no tener ninguna prisa, iremos poco a poco con esta preparación, a fuego medio.
4. Uno de los secretos para conseguir que esta receta queda perfecta es añadir un poco de bicarbonato. Con media cucharadita será suficiente, le dará a la cebolla la posibilidad de soltar los azucares que lleva en su interior.
5. Vamos mezclando poco a poco controlando el fuego. La cebolla irá cogiendo ese color marrón que caracteriza este plato. Además de quedarse muy blandita para que quede más tierna.

Necesitaremos unos 50 minutos para tener la cebolla en perfectas condiciones, pasado este tiempo incorporamos el vinagre de Módena. Potenciará aún más su dulzor y le dará un color destacado.