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Bizcocho de nata casero

La receta de bizcocho de nata casero es de las mejores para realizar una de esas meriendas que dejan huella. El sabor de un dulce tradicional capaz de transportarnos a una época pasada repleta de alegría y felicidad. Una vez empieces a preparar este delicioso bizcocho de nata casero no podrás parar.  Cada vez que tengas la necesidad de ese punto dulce en tu vida, te pondrás manos a la obra. Además, tiene unos pocos ingredientes que siempre solemos tener en casa, entre ellos un lácteo muy importante para nuestra salud. Todo son ventajas a la hora de preparar un bizcocho como este.  Iníciate en la repostería con este postre de nata casero, toma nota de esta receta paso a paso.

Ingredientes:

Cómo preparar un bizcocho de nata casero

  1. El primer paso para preparar este bizcocho de nata casero es montar los huevos con el azúcar y la esencia de vainilla hasta que quede esponjoso. Con la batidora eléctrica y las varillas estará listo en unos minutos. Sabrás que está perfecto cuando duplique su volumen significará que han cogido la textura necesaria.
  2. Podemos empezar a preparar el horno mientras realizamos estos pasos. Es importante que esté a unos 180º grados. También será conveniente engrasar la bandeja donde meteremos en bizcocho con un poco de mantequilla, así evitarás que se pegue la masa.
  3. Es el momento de añadir la nata líquida a la mezcla. Este es el paso más delicado, deberás hacerlo con cuidado para que los huevos no se bajen y no pierdan nada de volumen. Debe quedar una mezcla lo más esponjosa posible.
  4. A continuación, añadiremos la harina y la levadura, es preferible que esté tamizada para que el bizcocho quede mucho más fino. La vamos pasando por un colador fino y mezclamos con movimientos envolventes hasta que sea una masa homogénea.
  5. Es momento de echar esta deliciosa mezcla en su molde correspondiente. Es mejor tener el horno precalentado a unos 180º. El bizcocho de nata estará listo en unos 30 minutos. Para saber si está listo podemos pincharlo con un palillo, si nos sale limpio es porque está bien.
  6. Solo quedará desmoldar y servir. Este bizcocho lo puedes ser el final de una deliciosa cena o una merienda de esas que hacen historia. Atrévete a preparar uno de los postres tradicionales más fáciles de hacer.