Árbol de Navidad natural o de plástico ¿Qué elección es la más sostenible?

Te damos las pistas para elegir tú árbol de navidad, dónde ir a comprarlo y cómo cuidarlo

  • Antonio Quilis Sanz
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

Llega la Navidad, aparece el momento de poner el árbol que nos haga sentir la emoción de estas fechas entrañables y para las mentes conscientes e inquietas también surge la duda de si debe ser natural o de plástico.

Según el experto paisajista Fernando Pozuelo, la tradición del árbol navideño «tiene su origen francés, en Alsacia, donde ya en el siglo XVI se adornaban los árboles con elementos de papel y manzanas.

Esta práctica se popularizó con rapidez en Alemania y siguió por el resto de países europeos hasta nuestros días, donde la tradición se extiende alrededor del mundo».

A la hora de comprar un árbol de plástico o adquirir uno natural hay muchas indicaciones que se deben de tener en cuenta, pero la más importante es saber que siempre hay que reciclarlo en el lugar adecuado y elegir la opción más sostenible, la que garantice su procedencia y su segunda vida.

Dos millones de árboles en España

También otras de las claves a tener en cuenta es su procedencia, el transporte, si viene en maceta o cortado y, si ofrecen el servicio de recogida y tratamiento adecuado tras las fiestas. Además, hay comprobar que la empresa que te lo venda ofrezca garantías y experiencia suficientes.

No hay muchos datos acerca de esta tradición pero, según Ecologistas en Acción, en 2011 se estimaba  que al menos dos millones de árboles de diversas especies (pinos, piceas, abetos y otras) acabarán tras las fiestas en los vertederos, tras permanecer un par de semanas en los hogares españoles durante la Navidad.

La organización alertaba entonces que «en su mayor parte se trata de especies no autóctonas, que durante este periodo no han recibido los cuidados mínimos imprescindibles para su supervivencia, y que suponen otro despilfarro más en esta época de excesos de consumo».

Los árboles artificiales no parecen tan sostenibles como parece

¿Árbol de Navidad de plástico o natural?

Otro ejemplo es el de Estados Unidos, país en el que más de cien millones de hogares tendrán un árbol de Navidad durante estas fiestas, según datos de British Carbon Trust y que refiere que de ellos, el 19% serán árboles naturales y el 81% artificiales.

Estamos hablando de un brutal movimiento de consumo que, sin duda tiene sus repercusiones y que, en un principio, parece que el más sostenible puede ser el árbol de Navidad de plástico frente al natural.  Sin embargo su huella ambiental, los gases que se emiten en su cadena de producción, transporte y desecho son mucho mayores que uno natural.

Los árboles artificiales se fabrican a partir de policloruro de vinilo (PVC), un derivado del petróleo que puede contener plomo y otras sustancias tóxicas y están fabricados, además de con plástico, también con otros materiales.

Además, según el Departamento de Comercio de los Estados Unidos, en torno al 80 por ciento de los árboles de plástico se fabrica en China, donde la mayor parte de la electricidad se genera a partir de la quema de carbón, una de las fuentes de energía más dañinas para el planeta.

Abetos 100% reciclables

Así mismo, Pozuelo defiende que «los abetos naturales son, por ejemplo, 100% reciclables ya que pueden replantearse o triturarse para obtener abono y son menos dañinos para el medioambiente que la decoración artificial, la cual genera una huella de carbono que alcanza los 40 kg de Co2».

Y, por supuesto, en ningún caso hay que ir por tu cuenta al monte a talar un árbol, porque además de ser una práctica totalmente prohibida puedes enfrentarte a una sanción económica.

Fernando Pozuelo cuenta cómo introducir la belleza de lo natural en los jardines, obteniendo una estampa navideña sostenible revisando «la salud de las especies, clave en la elección del abeto. Estas especies coníferas suelen crecer en zonas de montaña, debido a su necesidad de grandes espacios para poder desarrollarse».

Añade el paisajista que «son capaces de adaptarse a los cambios del clima, aunque hay que tener cuidado con las altas exposiciones al calor, ya que necesitan sentir el paso de las estaciones».

Antes de comprarlo, sacúdelo para ver si se le caen las agujas. Asegúrate también de que las agujas estén verdes y brillantes

Acude a comprar tu árbol de Navidad a un proveedor de confianza que garantice su procedencia y que tenga una experiencia probada

Dónde adquirir tu árbol de Navidad

Y, aquí llega la gran pregunta: ¿dónde comprarlos? Como recomendaciones siempre busca un proveedor cercano, local o que tenga una experiencia probada en esta actividad anual.

Por ejemplo, los estudiantes de las Escuelas Técnicas Superiores de Ingenieros de Montes (ETSIMFMN), Agrónomos y de la Escuela Universitaria de Ingeniería Técnica Forestal de la Universidad Politécnica de Madrid hacen todos los años su particular campaña de venta de abetos.

Advierten en su web que la «compra de abetos naturales supone una ventaja para el medio ambiente, frente a la opción de compra de uno de plástico ya que los primeros absorben en vida el dióxido de carbono de la atmósfera (principal gas causante del efecto invernadero)».

Vivero de árboles de Navidad

Abeto natural, mejor que el de plástico

Además, recomiendan el uso del árbol de Navidad natural frente a los de plástico porque «favorecen el uso de productos sostenibles que refuerzan el sector forestal y cuando el árbol muere produce un desecho totalmente biodegradable y que no contamina y se puede usar para la creación de compost (abono orgánico) u otros usos».

En cambio, «con el abeto de plástico sucede todo lo contrario, puesto que están fabricados con recursos no renovables como metal y plástico y mediante procesos químicos que generan residuos y gastos energéticos y, por supuesto, sin ningún beneficio medioambiental», explica uno de los estudiantes de la ETSIMFMN.

Sus abetos proceden de Lérida, provienen de un cultivo respetuoso con el medioambiente y todos ellos poseen raíces. Existen dos modalidades, bien son abetos enraizados, que cuentan con raíces primarias y secundarias, o bien son repicados, es decir, crecieron fuera de la maceta y solo poseen las raíces primarias.

Una vez concluida la Navidad, los estudiantes ponen en marcha un servicio de recogida a domicilio que recuperará los abetos. Posteriormente, los árboles que se encuentren en buen estado serán replantados y, aquellos que no, serán utilizados para compost, aprovechando que son un desecho biodegradable.

En maceta, enraizado o cortado

Otra de las opciones fiables es la de Mi árbol de Navidad, una iniciativa que todos los años ofrece «transformar los hogares en espacios llenos de magia y conexión genuina con la naturaleza». Desde su web, dan tres opciones de abetos, en maceta, enraizado o cortado, con un coste de entre 51 y 481 euros, a la medida de todos los bolsillos y necesidades.

Desde la empresa califican la actividad como protagonista esencial en la economía circular y generador de empleo en las zonas rurales y en la España menos poblada, garantizan que sus árboles naturales han crecido en las sierras de España, envían a toda la península y garantizan el reciclaje de tu árbol de Navidad.

Recogida a domicilio

A través de acuerdos con los ayuntamientos, los árboles en maceta obtienen una segunda vida en los parques urbanos de las ciudades, mientras que aquellos que no pueden ser replantados cierran el ciclo natural al convertirse en compost. Durante la temporada navideña, Mi Árbol de Navidad se destaca como colaborador esencial del Ayuntamiento de Madrid.

Más allá de la creciente venta de árboles en maceta con raíces, la empresa realiza la recolección a domicilio de todos los árboles naturales en la ciudad y sus alrededores, ya sean adquiridos a ellos o en otros establecimientos, es decir recogen los suyos y los árboles de los demás, en «un servicio que no solo contribuye al aire limpio de los parques municipales sino que va más allá al ofrecer productos adicionales».

Cuidados del árbol de Navidad

Los consejos para mantener en buenas condiciones el árbol de Navidad natural son muy sencillos. El paisajista Fernando Pozuelo nos dice que «durante el periodo festivo, los árboles que son adornados para dar una imagen navideña, pueden sufrir daños en las ramas de los árboles por las decoraciones. Por lo que se debe controlar el peso y tamaño de los elementos que se colocan».

Además, desde la Politécnica de Madrid, sus estudiantes nos recomiendan tres puntos básicos para cuidarlo: