Sostenibilidad en la acuiculra

La acuicultura española crece en certificación, sostenibilidad y compromiso social

APROMAR presenta su III Memoria de Ssotenibilidad del sector acuícola

El documento muestra los avances alcanzados, destacando que casi el 100% de la producción está certificada ambientalmente

El pescado de acuicultura española se sitúa entre los alimentos de origen animal con menor huella de carbono

  • Antonio Quilis
  • Periodista especializado en información medioambiental desde hace más de 20 años y ahora responsable de OKGREEN en OKDIARIO. Antiguo director de El Mundo Ecológico y colaborador en temas de medioambiente, ecología y sostenibilidad en Cadena Ser.

Nuestro país se posiciona como el principal país productor de especies acuícolas de la Unión Europea, con una producción en el sector de la acuicultura española de 266.060 toneladas durante el año 2023, con un valor en primera venta de 750,5 millones de euros.

Es el valor del un sector que ha presentado hoy en Cádiz su tercera Memoria de Sostenibilidad del sector acuícola impulsada por la Asociación Empresarial de Acuicultura de España (Apromar) y elaborada en colaboración con la Fundación Centro Tecnológico Acuicultura de Andalucía (Ctaqua) y la red de innovación REMA.

Apromar es la organización que aglutina al sector piscícola español, un total de 22 empresas que representan el 79% de producción de peces en España y que han participado activamente con sus datos en la redacción de esta memoria.

Compromiso con el medioambiente

Según sus responsables, «la Memoria de Sostenibilidad 2025 muestra el compromiso del sector con el desarrollo sostenible y su voluntad de acercar esta actividad estratégica a toda la sociedad».

José Carlos Rendón, presidente de Apromar, destaca que «las iniciativas presentadas en esta Memoria le están valiendo a la acuicultura española el reconocimiento de la comunidad internacional como una de las más avanzadas del mundo en innovación y desarrollo sostenible. En España podemos estar orgullosos de nuestra acuicultura».

En este contexto de sostenibilidad, Rendón destaca que «necesitamos más acuicultura española. España, con más de 8.000 kilómetros de costa, 8 grandes ríos, más de 5.200 instalaciones acuícolas, más científicos e investigadores trabajando en acuicultura que cualquier otro país del mundo, y la mayor cosecha acuícola de la Unión Europea, tiene un potencial estratégico extraordinario para liderar esta transformación azul del sistema alimentario».

En primer plano, Garazi Rodríguez, responsable del Plan de Producción y Comercialización de APROMAR y coordinadora de REMA, y Myriam Retamero, Directora Adjunta del Departamento de Innovación empresarial y Desarrollo de negocio en CTAQUA, durante la presentación de la Memoria de Sostenibilidad.

Alcanzar la soberanía alimentaria

A destacar es el dato de apuntar más alto y alcanzar la soberanía alimentaria con la sostenibilidad como bandera, ya que aún tenemos que importar la mayor parte del pescado que comemos en nuestro país. «El sector acuícola español está preparado para afrontar este desafío. Aún estamos lejos de alcanzar todo nuestro potencial», señala el presidente de Apromar.

En cuanto a la memoria, entre los avances más destacados del último año se recoge un aumento de la producción certificada ambientalmente, que alcanza ya el 98%, y un compromiso creciente con la transición energética, con un 87% de las empresas utilizando energía solar en alguna o en todas sus plantas.

Desde las páginas de este informe, único en Europa, «también se han logrado mejoras en el índice de puestos de trabajo fijos, que representa ya más del 85% del empleo generado por las empresas participantes».

Cálculo de la huella de carbono

En términos ambientales, uno de los hitos más relevantes ha sido la finalización del cálculo de la huella de carbono cradle-to-shel para especies clave como la lubina, el rodaballo y la trucha arcoíris, en colaboración con el Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentaria (IRTA).

Los resultados del estudio confirman que el pescado de acuicultura española se sitúa entre los alimentos de origen animal con menor huella de carbono, así la producción de 1 kilo de producto fresco de trucha, rodaballo y lubina, a la venta en un comercio minorista en España, se encuentra en un rango entre 4 y 5,5 Kg CO₂ eq (equivalente de dióxido de carbono).

Acuicultura en la costa española (Foto: Apromar)

Mejora en indicadores FIFO

En paralelo, desde la memoria y el sector se destaca que «se continúa reforzando la incorporación de materias primas alternativas y sostenibles». También se señala los progresos en los indicadores FIFO (First In, First Out) o PEPS (Primero en Entrar, Primero en Salir), un sistema de gestión de inventario que prioriza la salida de los productos más antiguos antes que los más recientes.

Este parámetro se utiliza en almacenes y negocios donde se manejan productos perecederos o con fecha de caducidad, ya que ayuda a reducir el desperdicio.

Estos indicadores FIFO, según la memoria de Apromar, se han visto muy reducidos en los últimos años debido al uso de fuentes alternativas a las dependientes de las pesquerías, fuentes basadas en la economía circular, además de incluir nuevos ingredientes de origen vegetal marino o terrestre como las microalgas, subproductos marinos o harinas y aceites de nueva generación. Además, las empresas productoras de piensos trabajan por conseguir materias primas certificadas en estándares de sostenibilidad y calidad.

Piensos más sostenibles y certificados

En este sentido se marca la línea a seguir en la evolución en la fabricación de piensos, que consiste en la reducción de ingredientes marinos, certificar su origen y en la mayor inclusión de otras fuentes de proteínas sostenibles y en el mayor uso de los subproductos.

La tendencia va en el camino de la utilización de fuentes alternativas de proteínas que no sean marinos o que no sean de pesquería, sean sostenibles y certificadas y de áreas no deforestadas.

Bienestar animal

Uno de los ejes clave de esta tercera Memoria es del bienestar animal, abordado desde una perspectiva científica, ética y normativa. Desde 2022, APROMAR ha promovido un grupo de trabajo especializado con la participación de universidades, ONG y centros de investigación.

Este esfuerzo ha permitido consensuar de momento cuatro guías técnicas de bienestar de los peces de acuicultura y destacan que ya se está trabajando en una quinta. Resaltan que en esta edición de la Memoria de Sostenibilidad, además, se incorporan indicadores específicos sobre bioseguridad y salud animal.

Avances en la huella hídrica

Por otro lado, el documento incluye una actualización de los Compromisos Sectoriales para 2030, que se estructuran en tres ejes: sostenibilidad ambiental, eficiencia productiva y fortalecimiento del capital humano.

En el ámbito ambiental, destaca la intención de avanzar en el cálculo de la huella hídrica para el año 2026, desarrollar proyectos de I+D+i para adaptarse al cambio climático y seguir implantando energías renovables y modelos de transporte más sostenibles.

Una instantánea de la presentación de la tercera Memoria de Sostenibilidad de Apromar en Cádiz

Proteínas de calidad y huella ecológica baja

En palabras de Garazi Rodríguez, responsable del Plan de Producción y Comercialización de Apromar y coordinadora de REMA, «esta capacidad de producir proteína de alta calidad con una huella ecológica tan baja es una de las grandes fortalezas del sector acuícola».

Rodríguez añade que «reafirmamos nuestro compromiso con la innovación, la transparencia y la sostenibilidad. España tiene la capacidad y la determinación de ser un referente en la transformación azul, y seguiremos trabajando para consolidar este liderazgo».

Durante la presentación se ha destacado que se ha avanzado en el análisis de ciclo de vida, en el que Apromar está trabajando en protocolos a nivel de europeo. También se ha reseñado el conseguir establecer una metodología de la huella de carbono en toda la cadena de valor en tres especies y conseguir la ganadería con menor huella de carbono de Europa.

Acuicultura más social

A nivel productivo, se apuesta por mantener la mejora en los índices de conversión alimentaria (FCR) y avanzar en la digitalización de los procesos, con un 75% de empresas que ya cuentan con planes activos en este ámbito.

En el plano social, la memoria refleja el reto de aumentar la participación femenina, actualmente en torno al 25%, promover la conciliación y el relevo generacional, y fortalecer la formación continua. En 2023 se impartieron más de 5.600 horas de formación entre las empresas participantes.

Como conclusión, desde Apromar se destaca que «la Memoria de Sostenibilidad de Acuicultura de España es un documento único en su ámbito en Europa. Su origen se remonta a 2021 como parte del Plan Estratégico de Comunicación de acuicultura (PLECA 2020-2025), con el objetivo de mostrar con transparencia y ética cómo se cultivan los peces en España, bajo los estándares de protección ambiental, seguridad alimentaria y calidad más exigentes del mundo».