El fino ‘zasca’ de Mariano Rajoy a Daniel Sánchez Arévalo por llevarle DVDs a Génova

Por fin se ha pronunciado Mariano Rajoy sobre el regalo que le hizo Daniel Sánchez Arévalo. El cineasta dejó en la sede del PP en Génova tres DVDs con películas españolas nominadas a los Goya de este año, para que el presidente las viera. Esta iniciativa vino a raíz de las declaraciones de Rajoy en una entrevista en Onda Cero asegurando que para su desgracia no iba al cine, sino que leía novelas. En una misiva, Rajoy ha agradecido el detalle. «Querido Daniel. Solo unas letras para agradecerte los DVDs. Es una manera amable e inteligente de meterte conmigo. Una invitación para que me aficione al cine, las veré. Un poquito de finura viene bien en un país más dado al estocazo».

El hecho de que el presidente no consuma cine nacional indignó al mundo de la cultura y a directores de cine, como Juan Antonio Bayona, que lo calificó como «un desprecio impensable en otros países». Pero Bayona no fue el único en alzar su voz contra la desidia cinematográfica de Rajoy. El director Daniel Sánchez Arévalo emprendió una cruzada personal con el objetivo de que Mariano se aficionara al cine español. Grabó un primer vídeo en Twitter en el que instaba al presidente a ver las películas que estaban nominadas.

«Estando la sede de Génova tan cerca de la Academia de Cine, pásate por aquí algún día y te llevas unos DVDs. O si no, te los acerco yo a Génova», fueron las palabras del cineasta, recomendándole especialmente la película ‘Tarde para la ira’, de su ‘primo’, Raúl Arévalo. En su alegato, llega a ponerle el ejemplo de sus Majestades los Reyes: «Ellos están bastante ocupados y ven cine español siempre que pueden».

Al obtener el silencio por toda respuesta, Arévalo cumplió con su proposición y se fue a la sede del Partido Popular con tres DVDs: «Como veo que no me has dado bola, he decidido venir a traerte ‘Tarde para la ira’, ‘El hombre de las mil caras’ y una película mía, ‘Azul oscuro casi negro’. De todas formas, te he traído el ticket por si decides cambiarlas por un libro», aseguró a las puertas de Génova.