Miles de rusos se manifiestan a favor del opositor Navalny en el 65º cumpleaños de Putin
Varios miles de partidarios del opositor ruso Alexei Navalny, actualmente detenido, se manifestaban este sábado en toda Rusia contra el presidente Vladimir Putin, que hoy cumple 65 años, a cinco meses de las elecciones presidenciales.
Antes de la manifestación, altamente simbólica, que congregó a un millar de personas por la noche en San Petersburgo (noroeste), ciudad natal de Putin, se llevaron a cabo marchas en unas 80 ciudades, desde Vladivostok (Extremo Oriente) al enclave de Kaliningrado, en el Báltico, convocadas por el carismático bloguero de 41 años.
Se efectuaron más de 120 arrestos, según la oenegé especializada OVD-Info, principalmente en ciudades secundarias, como Ecaterimbugo, en los Urales, o Samara, a orillas del Volga.
Tanto la movilización como la respuesta policial pareció ser inferior a las manifestaciones de primavera, cuando decenas de miles de personas salieron a la calle, jóvenes en su mayoría. Con todo, supuso un desafío directo al presidente ruso el día de su cumpleaños.
En Moscú, más de un millar de personas, sobre todo jóvenes, se congregaron en la plaza Pushkin y la calle Tverskaya, en el centro de la capital, a pesar de la prohibición de las autoridades, constataron periodistas de la AFP. Gritaban lemas como «¡Feliz cumpleaños!» o «Putin, vergüenza de Rusia».
«Quiero acabar con las artimañas de Putin», declaró a la AFP una manifestante en Moscú, Maria Antonyenko, una estudiante de 18 años. «Quiero que Rusia sea un país europeo. Quiero vivir libre. No quiero un régimen al estilo asiático o norcoreano».
La policía dio cuenta de 700 manifestantes. En medio de fuertes medidas de seguridad, las fuerzas antidisturbios bloquearon el acceso a la calle Tverskaya, una gran avenida que termina en el Kremlin.
«No podía no venir», explicó a la AFP Orest Cherchesov, 43 años, que fue detenido en una manifestación en primavera. «No apoyo a Navalny pero estoy aquí porque creo que tiene derecho a ser candidato a las elecciones».
Pocas posibilidades de presentarse
Aunque en estos últimos meses se ha impuesto como el principal opositor al Kremlin, Alexei Navalny tiene pocas posibilidades de poderse presentar.
La comisión electoral central consideró en junio que no era apto para presentarse a las elecciones presidenciales, a causa de una condena por malversación de fondos que data de febrero de 2017.
Vladimir Putin, en el poder desde finales de 1999, todavía no se ha declarado oficialmente candidato, aunque en Rusia nadie duda de que se presentará para ser reelegido.
El lunes, pocos minutos después de haber sido condenado a 20 días de cárcel por convocar manifestaciones no autorizadas, el opositor prometió «un regalo por el cumpleaños de Putin».
Navalny, que denuncia la corrupción de las élites desde hace años, multiplicó en estas últimas semanas sus mítines para intentar ampliar su base electoral.
La manifestación de San Petersburgo, segunda ciudad del país, tampoco había sido autorizada, como la mayor parte de las movilizaciones de la oposición. Alexei Navalny había previsto celebrar allí un mitin, antes de ser detenido.
Alrededor de 1.000 personas se concentraron en el Campo de Marte, en pleno centro de la antaño capital imperial rusa, constató una periodista de la AFP.
«Putin no me gusta», explicó Igor Klimov, de 20 años. «Desde que puedo recordar, siempre ha estado en el poder, y no vemos más que corrupción por todos lados».
Por su parte, Vladimir Putin presidió una reunión del consejo de seguridad ruso a media jornada, según el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
El telediario de la cadena pública Rossia-24 no informó acerca de las manifestaciones, dedicó tiempo en cambio a las felicitaciones para el presidente ruso de parte de dirigentes extranjeros y de creadores o restauradores de otros países.
«Vladimir Putin ha dado a la sociedad el sentimiento de amor y respeto por la patria», escribió Ramzan Kadyrov, dirigente de Chechenia, una república del Cáucaso ruso, en un mensaje publicado en Instagram, agregando que Rusia sigue siendo «un imperio muy poderoso».
El gobernador de la región de Tambov, a unos 400 km al sureste de Moscú, Alexander Nikitin, plantó junto a otros responsables locales 65 manzanos, como «símbolo de unidad con Vladmir Putin».