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Masacre en Sri Lanka: 207 muertos y 450 heridos en 8 atentados contra iglesias y hoteles de lujo

El terrorismo ha golpeado con fuerza en Sri Lanka. La policía ha confirmado que la masacre ha dejado 207 muertos y 450 heridos tras los ocho atentados perpetrados este domingo. De momento, ningún grupo se ha atribuido los atentados de este Domingo de Pascua.

El terrorismo ha golpeado con fuerza en Sri Lanka. Al menos 207 personas han muerto y al menos 450 han resultado heridas este Domingo de Pascua en Sri Lanka, primero por una cadena de seis atentados con bomba, ocurridos en un lapso de media hora contra tres iglesias del país y tres hoteles de cinco estrellas en la capital, Colombo, y por otras dos explosiones subsiguientes en un barrio del este de la capital y en un zoológico al sur de esta misma ciudad.

El nuevo balance lo ha proporcionado el portavoz de la Policía Ruwan Gunasekara, que ha desgranado las víctimas atendidas en cada hospital. Así hay 66 muertos y 260 heridos en el Hospital Nacional, 104 muertos y un centenar de heridos en el Hospital de Negombo, dos muertos y seis heridos en el Hospital de Kalubowila, 28 muertos y 51 heridos en el Hospital de Batti y siete muertos y 32 heridos en el Hospital de Ragama.

Además, Ruwan ha explicado que están interrogando ya a tres personas en relación con los atentados de Dematagoda y que la investigación sigue su curso, según recoge la prensa ceilandesa. Ruwan ha anunciado además que se han cancelado todos los permisos de la Policía y que se han extremado las medidas de seguridad en los hospitales.

Al menos 105 personas han muerto solo en una explosión, la ocurrida en la iglesia de San Sebastián, en la ciudad de Negombo, al norte de la capital. Otras 27 han fallecido otra de las explosiones, en la iglesia de Sión, en Batticaloa (provincia Oriental del país). La tercera detonación ha ocurrido en la iglesia de San Antonio, en el distrito de Kotahena, en la capital, Colombo, y ha dejado al menos 46 fallecidos.

 

Los tres hoteles afectados son el Cinnamon Grand, el Kingsbury y el Shangri-La, todos ellos en la capital, Colombo, y todos de categoría cinco estrellas. De momento no se han dado a conocer cifras de víctimas en estos tres atentados. Ningún grupo ha asumido la responsabilidad de los ataques, aunque desde el Gobierno se asegura que «los culpables han sido identificados», según el ministro de Defensa, Ruwan Wijewardene, sin dar más detalles.

Además, al menos tres policías han muerto en la explosión registrada este domingo en el jardín zoológico nacional de Dehiwala, a 10 kilómetros al sur de Colombo, según ha confirmado la dirección del hospital de Kalubowila al medio nacional News First.

Dos de los fallecidos murieron cuando estaban recibiendo atención médica. También se tiene constancia de varios heridos, pero todavía no se ha dado a conocer su cifra exacta. Se trataba de la séptima explosión del día en Sri Lanka hasta que minutos después ocurrió una octava detonación, en el distrito de Dematagoda, en el este de la ciudad, sin que por el momento se tenga información sobre víctimas. La Policía está realizando una búsqueda en los alrededores de la zona de la detonación tras recibir informaciones de que podría haber más explosivos en el lugar.

El Gobierno ha declarado un toque de queda nacional por los atentados, adelantada con efecto inmediato, después de que fuera fijada en principio a las 18.00 (las 14.30 en España) hasta las 06.00 del lunes (las 02.30 del lunes en España). Asimismo, el Gobierno ha anunciado un «apagón» de las redes sociales y servicios de mensajería en todo el país. Facebook y WhatsApp se encuentran actualmente bloqueados.

La Policía ha instado al público a permanecer en sus casas y que no se congreguen bajo ningún concepto en las zonas próximas a las detonaciones ni en los hospitales donde los heridos están recibiendo atención médica.

El presidente del país, Maithripala Sirisena, ha comparecido en un breve discurso ante la nación para expresar su consternación por las explosiones y pedir calma a la población, mientras que el primer ministro del país, Ranil Wickremesinghe, ha convocado una reunión de emergencia de su Consejo de Seguridad Nacional en su residencia particular.

«Condeno enérgicamente los cobardes ataques perpetrados hoy contra nuestra gente y pido a todos los ceilandeses que permanezcan unidos y fuertos en este trágico momento», ha lamentado el primer ministro en su cuenta de Twitter. «Por favor, evite propagar informes y especulaciones no verificados. El Gobierno está tomando medidas inmediatas para contener esta situación», ha recomendado. Todas las escuelas del país permanecerán cerradas el lunes y el martes, según ha confirmado el Ministerio de Educación.

De acuerdo con el censo nacional de 2012 del país, un 9,7% de los 22 millones de ceilandeses son cristianos declarados. La mayoría de la población del país, un 70%, son budistas, mientras que un 12,6% son hindúes reconocidos.

En 2018 se registraron al menos 86 casos de discriminación, amenazas y violencia contra los cristianos de Sri Lanka, según la Alianza Evangélica Cristiana del país (NCEASL), que representa a más de 200 iglesias y otras organizaciones cristianas.

Este año, la misma organización registró 26 incidentes de este tipo, incluido uno en el que supuestamente monjes budistas intentaron interrumpir una misa dominical.

En su informe de 2018 sobre los derechos humanos de Sri Lanka, el Departamento de Estado de EEUU constató que algunos grupos cristianos e iglesias informaron que habían recibido presiones para poner fin a las congregaciones, que en algunos casos las autoridades llegaron a describir como «reuniones no autorizadas». El mismo informe apuntó que los monjes budistas intentan, de manera habitual, cerrar los lugares de culto cristianos y musulmanes.