Internacional

Dilma Rousseff, ante el abismo de la destitución como presidenta de Brasil

Los diputados brasileños votaron este domingo por el impeachment de la presidenta Dilma Rousseff, sumiendo en la incertidumbre política a la principal economía latinoamericana, golpeada ya por la recesión.

El ‘sí’ recogió 367 votos en la Cámara, 25 más de los 342 que representan los dos tercios necesarios para aprobar la moción de destitución. El ‘no’ obtuvo 137. Hubo 7 abstenciones y dos diputados ausentes.

Decenas de miles de opositores de Rousseff que seguían la sesión por pantallas gigantes en las principales ciudades del país estallaron de júbilo cuando el diputado Bruno Araújo anunció por micrófono el voto que selló el resultado final.

«Qué honor que el destino me ha reservado, que de mi voz salga el grito de esperanza de millones de brasileños», dijo el legislador del PSDB (partido de Aecio Neves, derrotado en las urnas por Rousseff en 2014), antes de dar su «sí por el futuro».

La apertura de un juicio político de la mandataria del Partido de los Trabajadores (PT) debe ser ratificada ahora por un plenario del Senado.

En ese caso, asumiría el poder el vicepresidente Michel Temer, inicialmente por un periodo máximo de seis meses, pero completaría el mandato hasta 2018 si los senadores declarasen finalmente culpable a Rousseff, acusada de  manipulación de las cuentas públicas.

Rousseff, de 68 años, niega esas acusaciones, y las atribuye a una conspiración orquestada por Temer y por el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, quien a su vez está acusado por corrupción.

Cunha dijo al finalizar la sesión que pediría la activación del Senado desde este mismo lunes. «Brasil necesita salir del fondo del pozo y tenemos que resolver esta situación lo más rápido posible. El Senado debe darle celeridad», declaró.

Según colaboradores del presidente de la Cámara alta, Renan Calheiros, la votación en el plenario podría ocurrir en la segunda semana de mayo.

El líder del PT en la Cámara, José Guimaraes, se dijo determinado a dar esa batalla. «Los golpistas vencieron aquí en la Cámara», pero «esta derrota provisoria no significa que terminó la guerra», dijo Guimaraes a periodistas.