Internacional

La crisis entre Qatar y los países del Golfo por el poder económico en Somalia

La inestable Somalia es escenario de la crisis entre Qatar y los países del Golfo desatada hace dos años. Los principales países enfrentados en el conflicto regional, los Emiratos Árabes Unidos y Qatar, cruzan el estrecho estratégico de Bab el Mandeb hacia el continente africano, a Somalia, que se ha convertido en otra muestra más del deseo de EAU y Qatar de ser potencias económicas y regionales.

La situación ha llegado a tal punto de tener un componente geopolítico y diplomático de primer nivel, con ramificaciones en distintos países y sectores económicos. Así, parece que Somalia se está convirtiendo en una lucha entre las monarquías del Golfo Pérsico compitiendo por el poder y los beneficios en el Cuerno de África. Se trata de una  zona aledaño con la península Arábiga y con una situación estratégica: puertos, bases militares, comercio internacional, pozos de petróleo, tráfico de mercancías, de armas y de poblaciones.

La batalla por la hegemonía en Somalia entre EAU, que durante la última década ha desarrollado grandes inversiones en el país y la región, y Qatar, con una apuesta más reciente, no hace más que profundizar las inestabilidades en Somalia: principalmente la poca integridad territorial y la estabilidad institucional a nivel nacional que además sirve como práctica para que dicho pulso se replique en otros países como Sudán.

En una grabación un empresario cercano al emir de Qatar asegura al embajador qatarí en Somalia, Hassan bin Hamza Hashem, que en mayo se llevó a cabo un ataque extremista en Bosaso (principal ciudad portuaria, en el Golfo de Adén y al noreste del país) para promover los intereses de Doha en el país contra los Emiratos Árabes Unidos. «Los atentados y los asesinatos, sabemos quién está detrás de ello», dice el hombre de negocios Khalifa Kayed al-Muhanad dijo en una llamada al Embajador el 18 de mayo, una semana después del ataque, según el audio obtenido por el New York Times.

Al-Muhanadi dice que el ataque se realizó para «hacer que la gente de Dubai huyera de allí» en referencia a la capital económica de los Emiratos. «Dejen que echen los Emiratos, para que no renueven los contratos con ellos, y traeré el contrato aquí a Doha», dijo el empresario según las revelaciones y recogidos en el artículo titulado ‘Con armas, dinero en efectivo y terrorismo, los Estados del Golfo compiten por el poder en Somalia’.

Doha y el resto de países de la península arábiga han estado utilizando Somalia como un trampolín para sus crecientes ambiciones regionales, tanto en el Golfo como en África, desde que estalló la crisis del Golfo en 2017 cuando Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos (EAU), Bahréin y Egipto rompieron relaciones diplomáticas con ese pequeño pero rico Estado del golfo Pérsico. Algunos dicen que la lucha por el poder en Somalia y el Cuerno de África es una extensión de la Guerra Fría que ha irrumpido en la región desde la Primavera Árabe hace más de ocho años.

Preguntados por la grabación, ni el empresario al-Muhanadi ni el gobierno de Qatar negaron la autenticidad de la llamada telefónica aunque ambos dijeron que hablaba como un ciudadano privado y no era un oficial gubernamental. La grabación de la llamada telefónica fue realizada por una «agencia de inteligencia extranjera que se opone a la política exterior de Qatar».

Desde la elección de un nuevo presidente somalí, Mohamed Abdullahi Mohamed, en 2017 y coincidiendo con el estallido de la crisis diplomática del Golfo, la relación de Somalia con los Emiratos Árabes Unidos se ha deteriorado constantemente. El rico estado del Golfo parece decidido a castigar a la nación costera, devastada por la guerra, por negarse a tomar partido en su disputa diplomática con Qatar (se han mantenido neutrales) y ha retirado activamente el apoyo militar (pese a que EAU mantiene el estatus de ser el mayor socio comercial de Somalia). En consecuencia, los EAU corren el riesgo de deshacer su récord de progreso en el Cuerno de África, explicaba Global Risk Insights en abril. Turquía, mientras tanto, también ha mostrado más cercanía a Somalia en los últimos tiempos.

Somalia vive en un estado de guerra y caos desde 1991, cuando el dictador Mohamed Siad Barre fue derrocado tras una guerra civil, lo que dejó al país sin un gobierno efectivo y en manos de milicias radicales islámicas, señores de la guerra y bandas de delincuentes armados. La rivalidad feroz entre Emiratos y Qatar amenaza ahora, aún más, la soberanía y la integridad territorial de Somalia.

Mientras tanto, el grupo terrorista Al Shabab, que se adhirió formalmente a la red terrorista Al Qaeda en 2012, controla parte del centro y el sur de Somalia y lucha con el objetivo de instaurar un Estado islámico de corte wahabí en ese país.

Qatar Airways llega a Somalia

A principios del mes de julio la aerolínea estatal Qatar Airways estrenó operaciones en Somalia con el primer vuelo Doha-Mogadiscio. «Hemos respondido a la creciente demanda de los clientes por servicios a Somalia y desde hoy volaremos tres veces a la semana entre las dos capitales», dijo un responsable de la aerolínea. Qatar Airways opera 127 vuelos a la semana a 22 destinos en cinco países africanos.