Sánchez gasta 50 millones más en tener un ejército «ecológico» que en formarlo en ciberseguridad
Defensa se vanagloria de destinar 250 millones de euros a "mejorar la eficiencia energética"
Sin embargo, apenas gasta 200 millones en asegurar su formación en ciberseguridad
El Gobierno de Pedro Sánchez presume del gasto de 250 millones de euros en «mejorar la eficiencia energética» de las instalaciones para reducir la emisión de gases de efecto invernadero (GEI) generados por la actividad del Ejército. Sin embargo, esta cifra contrasta con el dinero destinado a Ciberseguridad e infraestructuras en la Plataforma Campus Virtual de Enseñanza Militar, que es de menos de 200 millones. Así lo anunció el Ejecutivo en el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa, es decir, el programa para incrementar la inversión en Defensa hasta el 2% del producto interior bruto (PIB).
El Gobierno ha manifestado su previsión sobre «las emisiones de GEI de las Fuerzas Armadas y de su industria y aplicar medidas para reducir las emisiones del sector militar y de su ejército». El Ejecutivo de Sánchez ha respondido por escrito a una pregunta de Sumar en la que apelaban a la «reducción de emisiones» para oponerse al aumento del gasto en Defensa y para justificar el recorte en la compra de armamento para el Ejército.
Los representantes de la formación de Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno, se quejaron al Ejecutivo, del que forman parte, de que «el sector militar genera emisiones de CO2» tanto en las actividades propias de las fuerzas armadas como en «todo el proceso de la cadena de suministro militar».
Por un lado, el partido magenta se quejaba de que «no se dispone de información oficial» sobre las «emisiones militares» en sus actividades. Por otro, lamenta que provocan la «destrucción de hábitats y ecosistemas, la contaminación de aguas y tierras por los desechos tóxicos». El Gobierno «debe obligar a informar y reducir las emisiones» a todos los «organismos dependientes del Ministerio de Defensa y, muy especialmente, a las fuerzas armadas», asegura.
Ahora, el Gobierno ha contestado que la estrategia del Ministerio de Defensa de Margarita Robles incorpora una «preocupación explícita por la sostenibilidad ambiental» dentro del «enfoque integral para fortalecer la base industrial de defensa». Y asegura que se enmarca en la «necesidad» de cumplir con «los objetivos nacionales y europeos de transición ecológica».
Para ello, desde La Moncloa aseguran que se han comprometido a «la implantación de tecnologías sostenibles» y a la «mejora de la eficiencia energética en los procesos productivos de las empresas del sector».
Por otra parte, el Ejecutivo afirma que «proporciona anualmente los datos sobre combustibles líquidos» que utilizan las fuerzas armadas para llevar la cuenta de los gases de efecto invernadero que emite el país. El Gobierno defiende que, de esa forma, está midiendo la huella de carbono de 83 instalaciones militares, pero pretenden alcanzar las 227.
Concretamente, se vanaglorian de haber destinado una inversión de 250 millones de euros al Ministerio de Defensa para «mejorar la eficiencia energética de sus instalaciones y para la generación de energía limpia». E informan de que se ha fijado el objetivo de que «la energía eléctrica suministrada debe contar con garantía de origen de renovables en un 100%».
Asegurar formación en ciberseguridad
Este gasto choca con el dinero que el Gobierno va a destinar a asegurar la formación en ciberseguridad de los miembros de las fuerzas armadas. El Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa recoge un punto de «ciberseguridad e infraestructuras para el soporte de la Plataforma Campus Virtual de Enseñanza Militar». Para ello, se invertirá 170 millones de euros.
Este plan se pondrá en marcha en un entorno que «responde a exigentes estándares de ciberseguridad y resiliencia». «Ante la evolución constante de las amenazas, su desarrollo requiere inevitablemente la incorporación de tecnologías basadas en inteligencia artificial», añade el plan gubernamental.
«Adicionalmente, se establecerá un Centro de Respaldo de datos para la red de Defensa. Y cooperación para actividades docentes de investigación, de desarrollo tecnológico u otra colaboración con Cluster CIBER TIC, (BLET Córdoba y Máster Dirección Logística 4.0 del ET), Universidad de Vigo (CERVUS), Universidad de Salamanca (SIGILAR y Monte La Reina), Universidad de León (UDRUME), UPM (DIANA OTAN)», reza el plan.
Por otro lado, el Gobierno también va a poner en marcha un Programa Especial de Modernización (PEM) para crear un «entorno virtual aislado de enseñanza en ciberseguridad». A este fin se destinarán 20 millones de euros y se pretenden «desarrollar, mediante los componentes y módulos necesarios la capacidad de crear, en un entorno virtual, campos de maniobras cibernéticos que permitan generar y emplear los escenarios operativos adecuados para alcanzar el grado de preparación y desarrollo de fuerza necesario».
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