El Rey inicia este lunes la ronda de contactos que determinará si propone a Sánchez para la investidura
Semana decisiva para saber si Pedro Sánchez se someterá a la investidura o España va de nuevo a unas elecciones. El Rey iniciará este lunes una ronda de contactos que determinarán si propone al líder del PSOE como candidato o habrá nuevos comicios el 10 de noviembre.
Serán ocho los dirigentes políticos a los que recibirá en el Palacio de la Zarzuela en esta primera jornada de las consultas que concluirá al día siguiente, el martes 17, cuando verá a otros siete, el último de ellos Pedro Sánchez.
Por tanto, habrá quince reuniones con los mismos representantes que acudieron a la anterior ronda, la celebrada el 5 y 6 de junio y tras la que el monarca propuso a Sánchez para una investidura que resultó finalmente fallida.
Al igual que en la anterior, tanto ERC como EH Bildu han rechazado el encuentro con el Rey.
El orden de las reuniones se fija de menor a mayor representación parlamentaria, por lo que el primero en desplazarse a Zarzuela será José María Mazón, el diputado del Partido Regionalista de Cantabria, la formación política del presidente de esta comunidad, Miguel Ángel Revilla.
Este partido fue el único al margen del PSOE que dio su apoyo a Sánchez como presidente en la fallida sesión de investidura celebrada en el Congreso el pasado mes de julio.
Tras Mazón, Felipe VI recibirá a lo largo de ese primer día de reuniones a Joan Baldoví (Compromís), Juantxo López de Uralde (Equo), Javier Esparza (UPN), Ana Oramas (Coalición Canaria), Yolanda Díaz (Galicia en Común), Alberto Garzón (IU) y Aitor Esteban (PNV)
Ya el martes será el turno, por este orden, para Laura Borràs (Junts per Catalunya), Jaume Asens (En Comú Podem), Santiago Abascal (Vox), Pablo Iglesias (Podemos), Albert Rivera (Ciudadanos), Pablo Casado (PP) y Pedro Sánchez (PSOE).
Esta última cita será a las 18:00 horas, y tras ella el Rey se reunirá con la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, para comunicarle su decisión de proponer un candidato a la investidura si ve posible que pueda salir adelante, o convocar automáticamente el 23 de septiembre unas elecciones que se celebrarían el 10 de noviembre.