Rajoy y Puigdemont se reunieron el 11 de enero en Moncloa
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, recibió el 11 de enero en el Palacio de La Moncloa al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a quien invitó para tratar de convencer para su asistencia a la Conferencia de Presidentes, a la que finalmente no acudió, informa este miércoles La Vanguardia.
Según este medio, Puigdemont propuso a su interlocutor intervenir ante el resto de dirigentes autonómicos para explicar sus planes de una Cataluña independiente, a lo que Rajoy se negó. Tampoco hubo acercamiento alguno en relación con una alternativa al referéndum que se convocará como muy tarde en septiembre.
Rajoy y Puigdemont almorzaron sin lograr avanzar en el diálogo, tal como se ve también a la luz pública. Posteriormente, informaron a sus manos derechas, Soraya Sáenz de Santamaría y Oriol Junqueras, respectivamente. Se desconoce por qué han optado por esconderlo y tratar cualquier alusión a un hipotético encuentro como algo pendiente.
Lo último en Cataluña
-
Los catalanes están de enhorabuena: el nuevo abono de transporte que será gratis si cumples este requisito
-
Alemania hace un ranking con los sitios más decepcionantes del mundo y el palo a España es histórico
-
Horarios de la Selectividad 2025 en Cataluña: a qué hora y dónde son los exámenes de la EBAU
-
Los Goya vuelven a Barcelona tras 26 años: cuando Almodóvar le cantó el cumpleaños al Rey
-
Un juez da la razón a la familia que se enfrentó a la inmersión lingüística en catalán de Illa
Últimas noticias
-
Feijóo exige de nuevo a Sánchez elecciones: «España no puede ser rehén de la delincuencia de su Gobierno»
-
Última hora de la crisis del PSOE y el informe de la UCO en directo: noticias de Pedro Sánchez y la dimisión de Santos Cerdán por corrupción
-
Llegó para desbancar a Mercadona y ahora está cerrando sus tiendas: adiós a este mítico supermercado
-
Lambán señala a Pilar Alegría: «Cerdán fue clave en el PSOE aragonés y sus cómplices mandan hoy»
-
Ferraz permitió a Santos Cerdán vaciar su despacho pese al riesgo de destrucción de pruebas