España

Garrido reclama al resto de comunidades un compromiso con la Constitución

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha pronunciado este lunes el tradicional discurso de Fin Año, en el que ha calificado este ejercicio como "políticamente complejo" y en el que ha reiterado su compromiso de seguir trabajando para que en 2018 el Gobierno regional sea "un aliado" que ayude a los madrileños a alcanzar sus objetivos.

En un discurso, emitido por Telemadrid y pronunciado desde el castillo de Manzanares El Real, que a principios de los años 80 fue escenario del proceso que conduciría a la aprobación del Estatuto de Autonomía de la Comunidad, Garrido ha ensalzado las «tres décadas y media» desde que los madrileños accedieron al autogobierno, un tiempo en el que la región «se ha transformado profundamente».

Para Garrido, la autonomía ha significado para Madrid tres cosas: un crecimiento económico sostenido que, pese a las crisis, se ha convertido en la «la primera economía nacional»; una orientación social de las políticas que ha permitido «desarrollar una extensa red de servicios públicos» y ha canalizado la vocación de «solidaridad» con toda España, de manera que Madrid es hoy también «un elemento de cohesión social para el conjunto del país».

Pese al año «complicado» vivido en la Comunidad, Garrido ha hecho hincapié en la «buena marcha de la economía», que se refleja «en los más de 120.000 empleos creados este año» así como en que Madrid haya sido calificada como la región con «más competitividad de España».

«Esta solidez económica es la que nos permite realizar una nueva bajada de impuestos, que los madrileños, especialmente los de menores rentas, van a notar en el año que ahora se inicia», ha subrayado el dirigente.

Garrido ha sostenido que Madrid cuenta con los «mejores servicios públicos» del país pero no se conforma porque «la competitividad económica» debe permitir que se avance también «en la justicia social y la reducción de los desequilibrios».

Por ello, «en una noche tan especial», el presidente regional ha querido trasladar su respaldo a las personas «más vulnerables, los que necesitan más apoyo de la sociedad madrileña» para que sepan que la Comunidad de Madrid «está con ellos».

«Con quienes todavía carecen de un empleo; con las personas que han perdido su hogar y aún no lo han recobrado; con las mujeres que padecen la violencia de género y precisan protección; con la infancia más desfavorecida; y con todos aquellos que, por cualquier circunstancia, necesitan nuestro respaldo», ha enumerado, sin olvidar «a quienes han sido víctimas de la sinrazón del terrorismo».

Exige financiación

El jefe del Ejecutivo ha defendido que entiende muy bien «las demandas, necesidades e inquietudes de la sociedad madrileña» porque él es «uno más» y las comparte. Garrido ha asegurado que sabe «lo complicado que resulta conciliar la vida familiar y la profesional, la dedicación que requiere educar a los hijos» o el esfuerzo que se hace para construir un futuro mejor para ellos.

Para Garrido, los retos que se afrontan al madrugar cada mañana, teniendo esas metas en mente, hacen que se comparta «un mismo deseo de progreso». Por ello, ha remarcado que «aunque presidir Madrid es una enorme responsabilidad, constituye también un gran honor».

«Me siento orgulloso de todos y cada uno de vosotros, de los madrileños y madrileñas que, con vuestro tesón y vuestra generosidad, contribuís a que la Comunidad de Madrid sea un espacio de libertad y solidaridad», ha clamado.

Que se alcancen esos objetivos es necesaria, según el dirigente autonómico, «la máxima colaboración institucional a todos los niveles, empezando por el Gobierno de la nación». «Desde la absoluta lealtad institucional, la Comunidad seguirá reclamando el trato justo que los madrileños merecen, y una financiación acorde al papel que desempeñamos como motor de la prosperidad nacional», ha defendido.

Y es que, Garrido ha insistido en su idea de que no concibe «trabajar por Madrid si no lo hace también para trabajar por España». Para el presidente, «en estos momentos confusos, en los que la unidad nacional ha sido puesta en cuestión, resulta más necesario que nunca que las comunidades» se comprometan con España.

«No podemos permitir que nadie fracture la sociedad, vulnerando el orden constitucional y el Estado de Derecho. No es hora de dudar de la legitimidad de nuestra democracia, sino de hacerla valer, ha defendido, para a continuación incidir en que en la Constitución, que celebra sus 40 años, se tiene una invitación «a la convivencia».

Se trata de «una convivencia que, al margen de las lógicas diferencias políticas, permite vivir y trabajar juntos, en un clima social tranquilo». Así, Garrido ha trasladado un gran abrazo al resto de autonomías y ha augurado que 2019 será otro «gran éxito» para Madrid.