Carmena otorgó 12 contratos a dedo a cuenta de Madrid Central para publicidad y asesorías

El Ayuntamiento de Madrid otorgó 12 contratos a dedo a raíz de la puesta en marcha de la zona de bajas emisiones Madrid Central. En lugar de un proyecto integral, la improvisación fue la nota dominante y a golpe de contratos menores el equipo de Manuela Carmena fue parcheando el plan a medida que hacía aguas.

Según consta en el Portal de Transparencia del Consistorio, entre 2018 y 2019 el área de Medio Ambiente y Movilidad sumó una docena de contratos sin concurso público bajo el epígrafe Madrid Central. Estos contratos menores de servicios se adjudican de forma directa siempre que no superen los 18.000 euros.

De hecho, varios de estos contratos se ajustan curiosamente a los 18.000 euros exactos que marca la ley para no tener que ser sometidos a concurso público.

En 2018 se gastaron: 14.991,90 euros en «un vídeo para la comunicación de las obras de Madrid Central», 6.668,29 euros en un «servicio de seguridad en la oficina municipal de la calle Bustamante», 4.688,75 euros en «carteles en los portales de edificios de residentes en Madrid Central» y 2.469,61 euros en la «instalación de banderolas para la difusión de la campaña de Madrid Central».

18.000 euros exactos

Ya en 2019 se han firmado otros ocho contratos. Se dedicaron 18.029,00 euros en «consultoría y auditoria de cumplimiento normativo del sistema informático de accesos», 18.029,00 euros en «asesoramiento técnico para el análisis de datos de la actividad de reparto de mercancías en Madrid Central», 18.136,69 euros en «vinilos para taxis para la difusión de Madrid Central» y 17.803,33 a «publicidad en autobuses de la EMT».

También se contrató una «asistencia técnica de operador de sonido para reuniones de la mesa de seguimiento de Madrid Central» (254 euros), más banderolas (5.381,48 euros), 100 chalecos de Madrid Central (448,91 euros) y otro encargo de seguridad en las oficinas de la concejalía en la calle Bustamante (10.613,78 euros).

Nuevo plan en septiembre

Tras las elecciones, el nuevo Gobierno de coalición entre el Partido Popular y Ciudadanos ha confirmado que modificará Madrid Central. Sin llegar a revertirlo, el equipo de José Luis Martínez-Almeida y Begoña Villacís van a anunciar un nuevo plan de calidad del aire que se presentará a finales de mes.

Mientras llega el día de la presentación, Almeida insiste en dos ideas. Por un lado, asegura que «el debate sobre Madrid Central tiene que estar superado» y que va a desarrollar políticas verdaderamente eficaces para reducir la polución. Y, por otra parte, subraya que para él en el centro está todo Madrid, no solo el núcleo alrededor del casco histórico. Es ahí, en toda la capital, donde quiere reducir la contaminación.

Hace hincapié en que la necesidad de que a las restricciones se acompañen de «alternativas». Quienes viven dentro del anillo de la M-30 saben que «la alternativa más poca eficiente es el coche». Además, resalta que «no será el plan de Almeida, será el de los 3.200.000 madrileños; están todas las alternativas encima de la mesa».