No hay dos sin tres, dice el refrán, y que a la tercera va la vencida, dice otro. A esto se podrían agarrar Paul Pogba y Zinedine Zidane este próximo mes de enero con el tercer intento de uno de los fichajes más complejos que han afrontado desde el Santiago Bernabéu en los últimos tiempos. El técnico madridista sigue considerando, pese a la ascensión de Fede Valverde, que la llegada de su compatriota supondría un salto de calidad «crucial» para el devenir de la temporada.
Las conversaciones entre Zidane y Pogba han vuelto a producirse en las últimas semanas. La situación, como un dejavú, está en el mismo punto que en los últimos compases del anterior mercado de fichajes. El entrenador madridista sigue deseando tener a su servicio al centrocampista del Manchester United, le considera determinante en la medular que visualiza a medio y largo plazo.
Por su parte, Pogba sigue como loco por vestir de blanco y ve prioritario llegar a la capital en enero, empeñado en no renovar su contrato, que en enero expirará en 18 meses. El jugador francés está intentando presionar al Real Madrid para que apriete todo lo posible para llevar a cabo su fichaje.
No está a gusto Pogba en Old Trafford, algo que se hace notar y que está sufriendo el club y Ole Gunnar Solskjaer, su actual técnico. De hecho, el centrocampista lleva sin jugar con la camiseta del United desde el 30 de septiembre, en el empate contra el Arsenal. Unos problemas en el tobillo han impedido al francés volver a jugar (solo ha disputado cinco partidos en esta temporada), aunque algunos rumores aseguran que está retrasando su regreso para forzar su venta en enero.
Tendría que salir alguien
El Real Madrid cuenta actualmente con 25 fichas en el primer equipo, más la de Rodrygo, con ficha del filial, que sumarían 26 futbolistas a las órdenes de Zidane. Los blancos no tienen margen de maniobra ahí y deben gestionar primero alguna que otra salida para dar cobijo a Pogba. El ostracismo de Mariano le coloca en la rampa de salida, así como los pocos minutos que ha disfrutado hasta el momento Brahim, al que se le planteará una cesión.
Los dos jugadores que realmente generarían un impacto que facilitaría el fichaje de Paul Pogba son los casos de James Rodríguez y Gareth Bale, que están en el mismo punto que a inicios de septiembre, en el escaparate.
