Seguido por todos los grandes de Europa, incluido el Real Madrid, que vigila de cerca su evolución, Eduardo Camavinga es uno de los jóvenes más prometedores del mundo. A sus 17 años, el centrocampista es un fijo en el Rennes y su proyección parece incalculable, de ahí que en Concha Espina recopilen informes suyos. Pero la competencia por su fichaje va a ser dura. Uno de los clubes interesados es el Milan, que quiere adelantarse al Real Madrid.
El club italiano sigue en crisis, y una de las posibles soluciones para salir a flote de manera definitiva es que llegue un gran inversor, compre el club y se gaste cientos de millones en fichajes. En esa ecuación entra Bernard Arnault, uno de los candidatos a hacerse con el control de la entidad rossonera. El empresario francés es el propietario de la firma de lujo Louis Vuitton y el hombre más rico del país vecino según la revista Forbes, ocupando el tercer lugar en el ranking mundial de fortunas.
Pues resulta que este hombre de negocios quiere adquirir la mayoría de las acciones del Milan y hacer un equipo campeón, y uno de sus planes es desembolsar 60 millones de euros por Camavinga y adelantarse así al resto de clubes interesados, entre ellos el Real Madrid, tal y como informa el medio ‘Le 10 Sport’.
El centrocampista, de 182 centímetros y de zancada amplia, es la gran revelación en la Ligue 1. Camavinga está siendo analizado y muy seguido desde dos de las más potentes ligas, sobre todo desde la española y la inglesa, pero el Milan entrará en juego si Bernard Arnault compra el club. También ponen el ojo sobre él lo ponen equipos como el Manchester City, Arsenal o Tottenham Hotspur. Con todo esto, en los despachos del Bernabéu deberán estar rápidos y al quite si quieren hacerse con los servicios del joven centrocampista.