El Real Madrid se pegó un nuevo trastazo fuera de casa ante el Joventut Badalona tras haber recuperado sensaciones en el Clásico de la Euroliga, que pasó factura a los de Chus Mateo con esas dos exigentes prórrogas (80-76). La mejor noticia para los blancos es que Usman Garuba (cuatro puntos, cuatro rebotes y una asistencia) pudo volver a jugar después de su lesión en un pabellón en el que el equipo visitante no perdía desde 2011.
El Joventut Badalona sorprendió al Real Madrid y puso la lucha por entrar a la Copa del Rey al rojo vivo, con cinco equipos empatados en la tabla con cinco triunfos. Robertson (18), Tomic (14) y Dotson (14), máximos anotadores de los verdinegros, fueron clave para que el equipo catalán sumara un más que meritorio triunfo ante el conjunto blanco.
Ambos equipos comenzaron el partido anotando situaciones de mucho mérito, ya que el nivel defensivo de arranque fue excelente en los dos lados. Devon Dotson en los locales y Mario Hezonja en los visitantes fueron los primeros en coger la iniciativa ofensiva. Aunque el Real Madrid hizo el amago de escaparse tras un triple posterior del ex verdinegro Alberto Abalde, el Joventut reaccionó con un gran Kassius Robertson para volver a poner por delante a su equipo en el luminoso.
La igualdad se mantuvo hasta un final del primer cuarto que se decidió con un triple sobre la bocina de Serge Ibaka para dejar un más que ajustado 21-23. El guion del partido no varió en el segundo periodo. Tanto el Joventut con Ante Tomic como el Real Madrid con Dzanan Musa no bajaron el nivel de anotación.
Una canasta del pívot croata puso el 33-32 y desde entonces el conjunto blanco metió la sexta marcha en el acelerador con triples de Facundo Campazzo y Gaby Deck para un 33-42 y provocar el tiempo muerto de Dani Miret. El parón hizo reaccionar a los locales, que con un parcial de 8-0 comandado por Artem Pustovyi volvieron a igualar la contienda.
Derrota del Real Madrid ante el Joventut Badalona
En la reanudación, el Real Madrid tomó la iniciativa para intentar escaparse en el marcador con dos canastas consecutivas de Campazzo, pero los locales se repusieron gracias al buen hacer en pista de Robertson para rebajar la desventaja local a cinco puntos. Dos triples seguidos del escolta canadiense empataron el encuentro a 53 puntos para poner el Olímpico patas arriba y hacer creer a todos los aficionados locales en la victoria.
El parcial verdinegro continuó y un canastón de Ante Tomic cerró el tercer cuarto para dejar al Joventut por delante en el marcador. Al equipo dirigido por Dani Miret no le entró el pánico escénico a ganar y arrancó el último cuarto mostrando una muy buena versión en ataque que hizo saltar todas las alarmas en el Real Madrid.
Un 2+1 de Devon Dotson puso el 64-57, lo que provocó el tiempo muerto urgente de Chus Mateo para intentar revertir la situación lo antes posible. Pese a que hubo mejoría blanca, la Penya se distanció tras un triple de Adam Hanga que hacía parecer que la victoria se quedaría en Badalona. Pero en un abrir y cerrar de ojos, Dzanan Musa y Mario Hezonja lideraron al Real Madrid y lo situaron a un punto en el último minuto (73-72).
El Joventut aseguró todos los tiros libres con una buena estadística de Guillem Vives y Kassius Robertson para dejar a los blancos ya sin posibilidades de victoria en la última jugada, cuando los verdinegros ya estaban cuatro puntos por encima. Finalmente, El Joventut se llevó el partido por 80-76 para convertir la clasificación de la Liga Endesa en un auténtico infierno.