El Real Madrid suma y sigue en la Liga Endesa y continúa una semana más como colíder -junto al Barça– tras vencer al Breogán por 91-73 en una tarde plácida de baloncesto en el Palacio de los Deportes. El equipo blanco se redimió de la derrota de entre semana frente a Olympiacos con una victoria fraguada en el despegue sin tapujos del primer y el tercer cuarto, permitiéndose incluso una relajación desmesurada en los últimos 10 minutos que a punto estuvo de acercar más de la cuenta a los gallegos en el encuentro.
Tavares fue un día más el principal estilete del Madrid, con 15 puntos, 3 tapones y 7 rebotes que llevan la estadística hasta unos 31 créditos de valoración. Musa fue el líder entre los exteriores y en el plano anotador, con 21 puntos, mientras que Yabusele, el único junto a Edy en superar –por poco– los 25 minutos disputados, ejerció de tercer espada en una victoria en la que pesaron los parciales del primer (24-11) y tercer cuarto (28-9) en un día en el que si no llega a arribar la relajación en el último, donde Breogán se puso incluso 16 arriba, habríamos hablado de una paliza muy superior.
El maquillaje del resultado de Breogán fue tan destacado como la actuación de Ethan Happ, quien se fue hasta los 21 puntos, 19 rebotes y seis recuperaciones de balón en una de las tarjetas más contundentes que se recuerdan en lo que va de temporada. Nenadic también anotó 21 puntos para un equipo que en sus individualidades principales estuvo a la altura, pero no pudo competir con la profundidad de plantilla de un Real Madrid que marcó la diferencia desde el triple, rondando parciales cercanos al 50% –47% al final–.
La salida al partido de los merengues, aún sin Williams-Goss y casi sin el Chacho –sólo tres minutos para él– fue todo lo contrario a lo que se le presuponía a un equipo sin directores de juego. Fluidos, contundentes, con ansias de gustar tras la reciente debacle en Atenas, los de Chus Mateo buscaron dejar el partido finiquitado lo antes posible, aunque debieron esperar porque en el segundo cuarto todo lo que había sido de color de rosa se empinó, en gran medida merced a la subida de nivel por parte de los gallegos.
El luminoso llegaba abierto al descanso pero ahí, con Tavares y Musa ejerciendo de líderes, el Madrid despegó haciendo el mejor baloncesto de la tarde, uno imparable para cualquier rival que no esté inspiradísimo enfrente. El parcial, de 28-9, explica por sí solo el sobresaliente en ataque y en defensa de los pupilos de Mateo, quien pudo rotar en el último periodo y casi le sale el tiro por la culata, ya que Breogán dio un susto, solventado al final, para una nueva victoria contundente del Real en la Liga Endesa, donde sigue mandando mano a mano con el Barcelona.
