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En su primera aparición de la temporada

Pogacar debuta ganando la Clásica Jaén tras un salvaje ataque a 42 kilómetros

Tadej Pogacar se hizo con la victoria de la Clásica Jaén Paraíso Interior en la segunda edición de esta Clásica por la provincia andaluza. El esloveno se llevó el triunfo con una exhibición individual puesto que se escapó en solitario cuando aún restaban 42 kilómetros para llegar a meta. El líder del UAE Team rodó con unas sensaciones inmejorables en su debut y a dos kilómetros de meta pudo celebrar un triunfo no exento de dramatismo al sufrir un pinchazo en la parte final de la etapa.

Al tratarse de la primera carrera que Pogacar iba a disputar en 2023, es normal que sus aficionados pudieran pensar que se iba a reservar en cuanto a lanzar ofensivas muy arriesgadas. Sin embargo, el bicampeón del Tour de Francia ni mucho menos especuló con probarse de piernas o agazaparse. A 42 km de meta, emprendió un ataque con el que dejó atrás a sus perseguidores. Así, dejó un claro mensaje a sus rivales de cara a esta temporada en la que quiere volver a ganar la ronda gala tras caer derrotado en la última edición frente al danés Jonas Vingegaard.

La etapa constaba de 178.9 km entre Úbeda y Baeza, con ocho tramos de sterrato, destapado o entrochado. Esto quiere decir que la carretera está sin cimentar, por lo que tanto Pogacar como el resto de ciclistas que disputaron la carrera se enfrentaron a travesías de tierra, arena o piedra. Pero, en ese duro terreno, fue precisamente donde el esloveno dio comienzo a su temporada personal y a ese recital que mete miedo al resto de ciclistas.

En la fuga de la jornada, también se encontraba un ciclista con mucho peligro, Sergio Samitier del Movistar Team. El grupo perseguidor, que se fue disipando poco a poco, estaba compuesto por Pogacar, Wellens y Hirschi del UAE Team. Por su parte, el INEOS contaba con Turnet y Tullet y también con otros corredores con algo más de experiencia como Lorenzo Rota y Andreas Kron.

No todo fue perfecto para Pogacar

Samitier, cuando marchaba como líder de la etapa en solitario, fue alcanzado por el grupo persecutor y apenas pudo aguantar a rueda de un insaciable Pogacar. No obstante, el esloveno tuvo una avería tras quedarse solo en cabeza. El del UAE pinchó y se vio obligado a cambiar rápidamente de bicicleta.

Por suerte para él, estaba pegado al coche de su equipo, quienes solventaron el problema y le facilitaron una bici lo más rápido posible, lo que no puso en peligro la primera posición. De hecho, a partir de ese momento empezó a distanciarse a más de un minuto de sus rivales pudiendo levantar los brazos en meta tranquilamente.