Argentina teme que Franchu ‘fiche’ por España

Francisco Feuillassier, conocido futbolísticamente como Franchu, está ante una de las decisiones más importantes de su vida: elegir la selección a la que representar. Argentino de nacimiento pero español de adopción, su increíble evolución en el Real Madrid no ha pasado inadvertida en la Federación Española de Fútbol.

Tal y como ha reconocido el presidente de su homóloga albiceleste AFA, Claudio Tapia, la tarea de persuasión de la RFEF va por buen camino: «Podría terminar jugando en otra selección». «No tuvimos la oportunidad de que vista la camiseta nacional», afirmó en declaraciones a TyC Sports después de la clasificación del combinado absoluto para el Mundial de Rusia 2018.

El natural de Mar de Plata es una de las joyas de La Fábrica. Franchu está dando pasos de gigante como se demuestra en tres acontecimientos actuales: el primero que fuese uno de los ocho canteranos elegidos por Zidane para hacer la pretemporada del primer equipo en Los Ángeles.

Ya allí, el chaval de 19 años corroboró el por qué de la llamada con unos 45 minutos fantásticos ante el Manchester United, en el que mostró al mundo sus cualidades de regateador y la difícil habilidad de usar las dos piernas por igual.

A la vuelta, Zizou evidenció la confianza que tiene puesta en Franchu incluyéndole en la lista B de la Champions League. Mientras, con el Castilla no estaba teniendo la misma de su compatriota Solari -titular en tan sólo un partido de Liga en Segunda División B hasta el momento.

El punto culmen de la química entre el primer entrenador y jugador fue su convocatoria para el partido ante la Real Sociedad por delante de otros fijos del filial madridista. A pesar de que no tuvo la oportunidad de debutar oficialmente, su tan sóla presencia sirvió para tener muy en cuenta que cuentan con él en el club, valga la redundancia.

Un descubrimiento de Esnáider

La historia de Franchu y el Real Madrid es cuánto menos curiosa. El pequeño viajó en 2008 a la capital de España para visitar a su hermano Santiago, por aquél entonces en la cantera blanca -ahora en el Chiasso suizo.

El ex madridista Juan Eduardo Esnáider, que ocupaba un puesto en la citada Fábrica, le vio aburrido en un entrenamiento y le invitó a participar… ¡y qué descubrimiento! Su ya citada técnica y velocidad en la conducción llamó la atención de Míchel, que era el jefe de las categorías inferiores, y pidió su fichaje al San Martín de su tierra argentina que ahora puede ser nada más que de nacimiento.