Un americano dice que esto de España no tiene sentido y los comentarios son oro
"Nuestros cargadores no funcionan aquí, y hay que utilizar un adaptador", explica
Los choques culturales son experiencias inevitables cuando nos adentramos en un entorno diferente al nuestro, y España, con su rica historia y tradiciones, no es una excepción. Recientemente, un estadounidense compartió su desconcierto ante algunas costumbres españolas, afirmando que «esto de España no tiene sentido». Su vídeo desató una serie de reacciones que revelaron las diferencias que a menudo se encuentran entre la cultura estadounidense y la española. Al llegar a España, muchos extranjeros se encuentran con un amplio abanico de diferencias que pueden resultar desconcertantes, desde los horarios de las comidas hasta las costumbres sociales.
Los comentarios del estadounidense, junto con las respuestas de los españoles, ofrecen una mirada fascinante a cómo cada cultura valora aspectos diferentes de la vida cotidiana. La manera en que los españoles disfrutamos de la sobremesa enfatiza una forma de vida que prioriza las relaciones humanas sobre la prisa. Por otro lado, la famosa siesta nos recuerda que el descanso también es parte del ritmo cotidiano. Estas diferencias culturales no sólo generan risas y confusión, sino que también ofrecen la oportunidad de aprender y adaptarse.
Las cosas que sorprenden un estadounidense en España
@damedamian Spain dont make sense #dameinspain ♬ original sound – DameDamian
El creador de contenido estadounidense @damedamian se ha hecho viral en redes sociales con su video viral en el que expone varias costumbres españolas que, según él, carecen de sentido. Con más de 970.000 visualizaciones en TikTok, una de las primeras observaciones del joven es la ausencia de secadoras en los hogares españoles. En lugar de utilizar este electrodoméstico, en España se suele tender la ropa al aire libre. «No hay secadoras aquí, la gente de aquí seca la ropa a mano’», explica mientras muestra imágenes de tendederos repletos de ropa al sol.
El influencer también destaca algunas diferencias en la tecnología, como el tipo de enchufes que se utilizan en España. «Nuestros cargadores no funcionan aquí, y hay que utilizar un adaptador», comenta mientras intenta conectar su dispositivo. Este tipo de desajuste en la infraestructura eléctrica resalta cómo incluso los detalles cotidianos pueden generar confusión para quienes vienen de otros países.
Además, le llama la atención la ubicación de los pomos de las puertas, afirmando que su colocación en el centro de las puertas carece de lógica. Esta observación divertida resalta cómo los detalles más pequeños de diseño pueden parecer extraños a quienes están acostumbrados a otras normativas. En su afán por comprender, el influencer se enfrenta a la realidad de que cada país tiene sus propias costumbres.
Por otro lado, la disparidad en los precios de productos como el diésel también llama su atención. El creador de contenido se sorprende al descubrir que en España el diésel es más barato que la gasolina, algo que contradice lo que ha vivido en Estados Unidos, donde el diésel suele ser el combustible más caro. Su desconcierto ante estas diferencias económicas pone de manifiesto cómo los precios de los productos pueden variar drásticamente de un país a otro.
La publicación del vídeo ha provocado una oleada de comentarios en TikTok, donde muchos usuarios españoles han respondido con humor. Por ejemplo, un usuario explicó que Estados Unidos es uno de los pocos países que no tiene el mismo tipo de cargador que España, mientras que otro defendió la práctica de secar la ropa al aire libre argumentando que es más eficiente y ecológico.
Este intercambio cultural pone de relieve no sólo las diferencias prácticas entre países, sino también las percepciones que cada cultura tiene sobre lo que es «normal». Las reacciones a las observaciones del tiktoker han mostrado cómo estas peculiaridades pueden ser vistas como una fuente de humor y una oportunidad para aprender sobre las tradiciones locales.
Diferencias entre EEUU y España
Las diferencias culturales entre Estados Unidos y España son notables y abarcan aspectos cotidianos, desde la alimentación hasta las costumbres sociales. En cuanto a las comidas, los estadounidenses suelen optar por la conveniencia y el «fast food», mientras que en España, la comida es un ritual social que se disfruta en largas reuniones familiares, a menudo comenzando tarde por la noche.
La percepción del tiempo también varía: los estadounidenses valoran la puntualidad, mientras que en España la relación con el tiempo es más flexible, extendiéndose a la vida nocturna. Socialmente, los estadounidenses son más directos en sus interacciones, mientras que los españoles suelen ser más reservados al inicio y crean relaciones con el tiempo.
En lo que respecta a la comunicación, en Estados Unidos es más informal y directa, mientras que en España se utilizan matices y humor para mostrar interés. La vida nocturna en EEUU se centra en bares y clubes, mientras que en España se disfruta de un recorrido por bares con tapas. Además, la cultura vacacional es diferente: en España, las vacaciones son más largas, reflejando una mayor importancia del tiempo libre.
Lo último en Curiosidades
-
Ni a las 8 ni a las 9: el consejo de los expertos sobre cuándo hay que hacer la cama
-
Este pueblo al lado de Madrid está buscando vecinos: ofrecen trabajo y casas tiradas de precio
-
Adiós a Nueva York: el día exacto que va a desaparecer según una profecía
-
La prueba que puedes hacer ahora y que revela cuál es tu edad: te vas a sorprender real
-
Nunca te habías fijado: la casa más estrecha de España está en esta conocida plaza
Últimas noticias
-
Estos son los 71 pueblos de Valencia afectados por la trágica DANA
-
Mazón anuncia ayudas de 6.000 euros para las personas que hayan perdido la casa por la DANA
-
Los juzgados reciben otras dos denuncias contra Íñigo Errejón por agresión sexual
-
DANA en Barcelona y Valencia hoy en directo: muertos, desaparecidos y última hora de zonas afectadas en alerta
-
Una voracidad confiscatoria que llega hasta la repugnancia