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Vox permitirá a Prohens aprobar el techo de gasto tras alcanzar un acuerdo sobre inmigración y lengua

Vox se abstendrá y con ello, el PP ya cuenta con los votos suficientes para sacar adelante el techo de gasto

Vox ha anunciado este lunes que se abstendrá en la votación del techo de gasto que se producirá este martes en el Parlament. Esta abstención permite al Govern de Marga Prohens dar el primer paso para la aprobación de los presupuestos de 2025. Según ha anunciado la portavoz de Vox, Manuela Cañadas, la formación ha decidido abstenerse después de llegar a una serie de compromisos con el Govern del PP y, entre otros, la lucha contra la inmigración ilegal y el impulso a la libre elección de lengua.

Con la abstención de Vox y con el apoyo del diputado de Formentera, Llorenç Córdoba, el PP ya tiene más votos que el bloque de la izquierda para sacar adelante el techo de gasto. Además, el PP tiene en principio el voto a favor del diputado ex de Vox Xisco Cardona  y el de Agustín Buades, que recientemente ha abandonado el grupo parlamentario de la formación de Santiago Abascal.

Vox ha optado por la abstención tras conseguir el compromiso del Govern de no acoger a más menas en caso de que el Gobierno de Pedro Sánchez decida repartirlos por las distintas Comunidades Autónomas. Este punto, ha dicho Cañadas, era una «una línea roja para Vox porque estamos ante una invasión».

Cañadas ha añadido que hay una «disposición firme» del Govern para adoptar medidas contra la inmigración irregular, las políticas de efecto llamada o la okupación de viviendas. Igualmente existe el compromiso, según la portavoz de Vox, de seguir avanzando en el plan de libre elección de lengua y la derogación definitiva de la Ley de Memoria Democrática.

Cañadas ha dicho que a falta de cerrarse un acuerdo definitivo para la aprobación de los presupuestos, «Vox constata avances significativos en temas prioritarios, como la lucha contra la inmigración ilegal y las políticas de efecto llamada, especialmente el rechazo a acoger más menas», un fenómeno que está afectando especialmente a las Islas Baleares y que provocó la ruptura de los acuerdos de investidura.

Vox y PP seguirán negociando en las próximas semanas para cerrar un acuerdo que permita aprobar los presupuestos de 2025, y que, según Vox, «deberán incluir medidas concretas y decididas en torno a los ejes que marcó el partido en la reunión con todos sus portavoces del pasado 7 de octubre y que son la lucha contra la inmigración ilegal y contra la okupación, las rebajas fiscales y medidas de apoyo a las familias y a la
vivienda».

Será este martes cuando el Parlament vote la propuesta del Govern del techo de gasto de las cuentas públicas de Baleares para 2025 de más de 6.500 millones de euros, después de haberlo presentado al resto de formaciones políticas.

El vicepresidente, y conseller de Hacienda, Antoni Costa, manifestó el pasado viernes que las negociaciones con Vox iban por buen camino. Añadió que había voluntad por ambas partes de llegar a un acuerdo y desde el Govern tenían «buenas perspectivas».

En relación con las peticiones concretas que había hecho Vox, como la puesta en marcha de la Oficina de Libertad Lingüística o la implantación del pin parental, Costa indicó que la negociación es en «sentido amplio» y que afecta a distintos puntos, «no sólo pin parental». «Algunas de ellas las pactaremos y aceptaremos y otras no», agregó.

Sobre este asunto, la portavoz de Vox en el Parlament, Manuela Cañadas, señaló el pasado lunes, 14 de octubre, que el voto a favor de su formación para la aprobación del techo de gasto «no está garantizado» e indicó que «seguían luchando» algunas medidas en las negociaciones con el PP.

Aún así, la parlamentaria destacó la relación de «cordialidad» con el PP, al recordar que su formación no está en Baleares para «votar que no a todo», sino que tiene la voluntad de «negociar punto a punto» para implementar su programa.