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Muere un hombre de 83 años al derrumbarse el techo de un garaje en el municipio mallorquín de Campos

Han sido sus familiares que se encontraban en el inmueble los que han avisado al 112

Los hechos han sucedido sobre las 16.00 horas en un inmueble de dos plantas

  • Indalecio Ribelles
  • Redactor de OKBaleares, información local de Palma, social y política. Antes, redactor en EL MUNDO/ Baleares durante 20 años.

Un hombre de 83 años ha muerto este viernes al derrumbarse el techo del garaje de una vivienda de Campos y quedar sepultado bajo los escombros.

Los hechos, según ha informado el SAMU 061, han sucedido sobre las 16.00 horas en un inmueble de dos plantas ubicado en una finca de la localidad mallorquina. Han sido los familiares de la víctima, que se encontraban en el inmueble, los que han avisado al 112.

Los servicios de emergencias han sido alertados por los familiares de la víctima, quienes después del derrumbe no conseguían dar con su paradero dada la gran cantidad de material que se había acumulado en el lugar del siniestro.

Hasta allí se han desplazado efectivos de la Guardia Civil y la Policía Local de Campos, así como un médico del centro de salud del municipio, dos ambulancias y un vehículo de logística del 061.

Tras llevar a cabo una búsqueda finalmente han logrado encontrar entre los escombros al hombre, que presentaba heridas incompatibles con la vida y ha fallecido.

El siniestro se produce mes y medio después de que a finales de diciembre un total de 11 personas tuvieron que ser desalojadas por riesgo de derrumbe de un edificio en la localidad mallorquina de Inca, situado en la calle d’En Martí Metge, al producirse el hundimiento de unas vigas del primer piso.

El edificio en cuestión que quedó inhabitable y que fue precintado, contaba con una planta baja y dos alturas. Tras evaluar la situación y el estado del inmueble, el Consistorio inquer requirió al propietario, que alquilaba las viviendas, que reparase los desperfectos a la mayor brevedad posible.

En aquel caso tras producirse el incidente, el Ayuntamiento tuvo que buscar una solución habitacional de urgencia para casi todos los afectados, puesto que salvo una persona, ninguno de los otros contaba con familiares u otro tipo de alternativa.