El Gobierno sigue haciendo favores a los presos de ETA: Iñaki Bilbao compartirá celda con dos etarras más
El etarra Iñaki Bilbao, en prisión por asesinar en 2002 con tres tiros por la espalda al concejal socialista de Orio, Juan Priede, comparte ahora su celda con otros dos presos de ETA que asesinaron, en sendos casos, a policías, Óscar Barreras Díaz y Daniel Pastor Alonso. De este modo, el Ministerio de Interior que dirige Fernando Grande-Marlaska cede al chantaje de la huelga de hambre de Bilbao, motivo por el cual se le ha dado este beneficio penitenciario.
Fuentes de la prisión de Puerto III, cárcel gaditana en la que se encuentra Iñaki Bilbao, aseguran a OKDIARIO que desde que el etarra volvió del hospital tras ser sometido a alimentación forzosa, se encuentra siempre acompañado, o bien del etarra Óscar Barreras Díaz, asesino del inspector de Policía Luis Andrés Sañudo en 1997, y Daniel Pastor Alonso, condenado a varios cientos de años por varios asesinatos, entre ellos el del policía Eduardo Puelles con un coche bomba en 2009.
Con la excusa de estar bajo vigilancia por su huelga de hambre, Iñaki Bilbao pasa las horas acompañado por dos miembros más de la banda terrorista… y todos ellos son asesinos. Esta decisión la toma en última instancia el Gobierno socialcomunista de Pedro Sánchez, concretamente el Ministerio de Interior.
Huelga de hambre
Iñaki Bilbao ya se ha despedido de sus familiares porque, según ha dicho, irá «hasta el final» con la huelga de hambre que esta haciendo como protesta por pedir el Juez una prueba de ADN.
Iñaki Bilbao Goikoetxea, alias ‘Txikito’, ha vuelto a la prisión de Puerto III tras haber sido ingresado en el hospital Universitario de Puerto Real. Una vez el juez dictó la alimentación forzosa tras más de 20 días sin comer, ha vuelto a la cárcel, pero insiste en que no se alimentará e irá «hasta el final».
Fuentes de Puerto III aseguran que, efectivamente, a día de hoy mantiene su huelga de hambre y, de hecho, sospechan que pronto tendrá que volver a ser trasladado al hospital para ser sometido de nuevo a alimentación forzosa.
Conflictivo
Bilbao es uno de esos etarras que, tras casi veinte años en prisión, no se arrepiente de absolutamente nada. Repudió abiertamente el final de la lucha armada por parte de ETA, y continúa desafiando a todo aquel que se cruza en su camino. Apenas se salvan dos o tres reos que juegan con él al frontón.
«Bilbao siempre desafía con la mirada. Hace años que está aquí y siempre lo hace. Hace una resistencia pasiva constante a las órdenes que le damos», explican las mismas fuentes, que admiten que los habituales ‘pase por aquí’, ‘siéntese aquí’ o ‘vaya por ahí’, son sistemáticamente incumplidos por el etarra, orgulloso de serlo.
Por suerte, gracias a la creación de una unidad de Control y Seguimiento de los presos, que se encarga de los internos más peligrosos -entre ellos los etarras-, se encargan de vigilar posibles alegorías y pancartas en favor de sus organizaciones criminales. Bilbao, en este sentido, no suele pronunciarse. Cabe recordar, eso sí, que a Iñaki Bilbao le dieron la espalda muchos miembros de la banda, precisamente por oponerse a su dirección en la decisión de abandonar la lucha armada.
«La asociación Etxerat, de apoyo a los presos vascos, sí que viene a Puerto III a veces con proclamas etarras, pero hace tiempo que no les vemos», explican las mismas fuentes.